Hace tiempo, UPN rotuló el parque Paderborn de Iruñea de manera bilingüe: en castellano y alemán. Ni rastro de euskara, por supuesto. Fue el movimiento euskaltzale de Iruñea quien consiguió que se rotulase también en euskara.

El paseo 25 de noviembre, el parque del Orfeón Pamplonés, los carteles de entrada a Iruñea... fueron rotulados únicamente en castellano por parte de UPN, y gracias al movimiento euskaltzale de Iruñea se consiguió que se rotularan también en euskara. Por suerte, a diferencia de otras ocasiones, el Tribunal Administrativo de Navarra suele dictar en este caso resoluciones favorables al euskara: es decir, a favor de que se escriba también en euskara, en aplicación de la Ordenanza del Euskara de Iruñea.

Hace un año, el Ayuntamiento de Iruñea puso el nombre de la Constitución a una plaza (una constitución que privilegia el castellano y subordina el euskara) y, cómo no, la rotuló únicamente en castellano. El TAN dictaminó que debía escribirse también en euskara, pero, más adelante, el Juzgado de lo Contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Navarra decidió que el Ayuntamiento no estaba obligado a rotularlo también en euskara. El objetivo del juzgado queda claro: no es suficiente con que el euskara desaparezca de los servicios públicos, también debe desaparecer del paisaje lingüístico.

Por eso, para hacer frente a la justicia euskarafóbica y para reivindicar que queremos las calles en euskara, hemos convocado una concentración el jueves 23 de febrero, a las 18 horas, en la plaza de la Constitución. ¡Basta ya! ¡Estamos hartas y hartos de decisiones en contra el euskara!

*Euskararen Defentsarako Sarea