Me dirijo a usted que es presidente de Unión del Pueblo Navarro (UPN) y candidato a la presidencia del Gobierno de la Comunidad Foral de Navarra. Comienzo confesándole que no soy ni simpatizante ni votante de UPN. Lo hago enviando esta carta a los dos periódicos que se reciben diariamente en mi casa (Diario de Navarra y DIARIO DE NOTICIAS). Nuestra realidad es compleja, con muchos y diferentes matices. Por eso me gusta leer sendos periódicos por aquello de formarme una opinión lo más amplia y completa posible. En los medios sociales de comunicación se recogía esta afirmación suya: “Esparza celebra una victoria sin paliativos y pide acordar para que Bildu salga de cualquier ecuación política”. Usted es dueño de lo que dice. Por supuesto usted no es dueño de lo que los demás entendemos. Tal y como yo entiendo la expresión “salir de cualquier ecuación política”, ésta es un error. Mejor aún, un craso error. Más aún, si cabe, en un dirigente político, presidente de un partido político, y que aspira a ser presidente de esta Comunidad Foral de Navarra. Y le voy a tratar de decir porqué. No se puede y no debe obviar una realidad aunque ella no entre en nuestras expectativas ni nos satisfaga o, incluso, nos duela y estorbe.
La realidad es también que EH Bildu ha obtenido el mayor número de concejales en Navarra, 345 en total, frente a los 246 de UPN. Un dirigente político como usted no puede obviar la realidad social y política de la masa de votantes que, con adultez y libertad, ha pensado, decidido y elegido como sus ediles a representantes políticos de EH Bildu. Y termino mi carta confesándole que tampoco soy simpatizante ni votante de EH Bildu. Un cordial saludo.
