¡Gracias, Marian! ¡Hasta siempre, Marian!

Siempre me ha parecido bonito agradecer a través de unas letras la existencia de alguien recientemente fallecida, como recuerdo y como despedida pero también como bálsamo para su familia. También pienso que las cosas que se dicen son merecidísimas, porque el esfuerzo de escribir y enviarlo a la prensa bien lo merecía la protagonista. Y hoy me quiero poner a ello porque creo que Marian Huarte lo merece. Marian, nuestra pediatra.

Profesionalidad

El jueves recibimos con enorme tristeza la noticia de su fallecimiento y fue un día muy triste para muchas familias de Huarte que tantos años hemos compartido con ella el cuidado de nuestros hijos e hijas, nuestros desvelos y nuestras preocupaciones. Y ya no lo volveremos a hacer. Cercana, afrontaba las situaciones con mucha calma, transmitía seguridad en sus diagnósticos.

Tengo un hijo y una hija. Con ambos, por diversas circunstancias hemos tenido cuestiones médicas delicadas y puedo decir que ha sido una enorme suerte contar con la profesionalidad de Marian. Nunca nos ha alarmado, lo que nos generaba confianza y mitigaba desvelos. Si dudaba, también nos lo mostraba y se comprometía a analizar la situación, llamándote por teléfono posteriormente si era necesario. Y llamaba, ya lo creo que llamaba. Si se comprometía lo hacía, creando una relación de confianza pediatra-familia de la que siempre le estaré agradecida.

Especialmente en la salud de nuestros hijos, contar con una profesional que sabe personalizar la atención, que nos entiende sin hacer dramas, que sabe de la importancia de la comunicación directa y la ejerce, que afronta las situaciones con honestidad, sin posicionarse por encima de nadie... eso, las madres y padres que hemos tenido la suerte de conocerle sabemos lo que vale. Y esa fue Marian para mi familia, la mejor pediatra que pudimos tener, por eso estamos tristes. Por eso hoy quiero escribir, hoy me toca escribir ¡Gracias, Marian! Hasta siempre. Marian!

Marian era pediatra del CS de Huarte, Gorráiz y Esteribar.