Democratizar la energía

Que se acabe el monopolio de la energía en manos privadas y que se acabe la complicidad de algunos ayuntamientos y el Gobierno de Navarra.  El Ayuntamiento de Etxauri tiene previsto aprobar un macroproyecto fotovoltaico de 80.000 placas en la sierra de Sarbil, que llevaría a cabo un promotor privado. El Ayuntamiento no ha informado a los vecinos y vecinas, pero ha trascendido, se ha conocido en el pueblo y en el valle y se ha rebelado la ciudadanía, protestando para que paren el despropósito de llenar de placas fotovoltaicas un monte tan emblemático.

Hay que detener, asimismo, las plantas solares fotovoltaicas en Tierra Estella o el parque eólico previsto entre Corella y Cintruénigo o en la sierra de Sarbil, para preservar el suelo agrícola y los montes. Además, en Navarra somos grandes exportadores de energía a otros territorios y este tipo de proyectos en los montes y en el campo solo sirven para enriquecer a las macroempresas.

En la formación política Eguzkilore, preferimos apostar por el autoconsumo en los pueblos y en las ciudades y no colocar más molinos y placas solares en los montes y dejar a los campos en paz. Nos parece conveniente recuperar, con la tecnología que tenemos ahora, las presas o los azudes que están integrados en el espacio natural y son esenciales para generar energía hidroeléctrica. También estamos a favor de la Comunidad Energética Local (CEL) Toda Energía Navarra, que está formada principalmente por ayuntamientos de Navarra (inicialmente 26, extendiéndose a más de 63 localidades), junto con ciudadanos, pequeños comercios y pymes que participan voluntariamente, generando en los cascos urbanos o en los polígonos industriales y consumiendo su propia energía renovable.

Sobre la biometanización (como purines, residuos alimenticios o industriales) en biogás, el Gobierno de Navarra, a través del Parlamento, aprobó en octubre de 2025 una moratoria de 12 meses para nuevas plantas de biometanización, en concreto ocho plantas. Hay cuatro más en tramitación y otras cuatro ya instaladas, todas ellas son privadas, ademas de existir dos públicas. 

Las nuevas plantas están generando oposición en los vecinos y vecinas de los municipios por su ubicación cerca de los pueblos, por los malos olores, porque causan problemas respiratorios, pueden ocasionar irritación ocular, tos, dolor de garganta, dificultad para respirar, bronquitis, neumonía, edema pulmonar y otras patologías. Y también generan contaminación de acuíferos y suelos.

La Fundación Sustrai Erakuntza denuncia que “no existe ningún tipo de planificación para este tipo de instalaciones en la Comunidad Foral. Además, que el Gobierno de Navarra, y en especial el Departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, fomentan el desarrollo sin control de estas plantas de biometanización”. “El gran lobby de la ganadería industrial y las macrogranjas, intenta aumentar sus grandes beneficios entrando en este sector”.

En vez de traer los residuos de otras comunidades ¿por qué no se realizan en zonas despobladas y que la gestión sea pública? Y ser muy estrictos en la evitación de la contaminación de agua y suelo. Es necesario apoyar la ganadería pequeña y mediana, pero no subvencionar a las macrogranjas.

¿Por qué no implantan consultas en los ayuntamientos y el Gobierno de Navarra, poniendo en práctica la democracia directa? La democracia directa consiste en la participación real de las ciudadanas y ciudadanos en la toma de decisiones políticas que atañen a la sociedad. Está recogido en el programa de Eguzkilore. Es una forma de dar el poder al pueblo y poner límites a los políticos.

* Coordinador de Eguzkilore