A la Generalitat le quedan 8 días para informar al juez sobre los gastos del referéndum del 1 de octubre. A Puigdemont le sobran días desde el miércoles. Ya respondió que contando desde el 22-S, las cifras son: 1.000 heridos + 314.000 euros en daños de la Policía Nacional a las escuelas + 3 barcos a 300.000 euros/día + 38 hoteles para los cuerpos policiales + sus dietas. Confiando en los datos, eso sería lo que estamos abonando entre todos, seamos y/o nos sintamos muy, poco o nada españoles, vascos, murcianos, catalanes o del Maestrazgo. La jueza Lamela, muy popular en Change.org por el exceso manifiesto que supone encarcelar a unos políticos por los motivos aducidos, también sabe lo suyo. Concretamente que ya puede embargar a Puigdemont y los 13 exconsellers cuentas y bienes por valor de 6,2 millones de euros, la fianza que fijó la Fiscalía. (Vamos a pensar que las familias contarán con una caja de resistencia). Les sale a 477.000 euros por cabeza, no mucho más que los 400.00 que ha conseguido reunir en 24 horas Ignacio González para decir adiós a su suite en Soto del Real y a los Jordis, que van a seguir dentro porque la Audiencia Nacional ha confirmado su prisión. González está fuera mientras se le sigue investigando por blanqueo, malversación, cobro de comisiones ilegales, saqueo de lo público? Sí, hacer leña de esos políticos del PP que llevan consigo la corrupción como las venas la sangre es lo fácil y “lo obvio”. Pero son muchos ya para quienes “lo obvio” está siendo tolerar, aceptar, apoyar o impulsar el encarcelamiento como única medida plausible de unos políticos cuya trayectoria ha discurrido unos cuantos grados en dirección opuesta a la de caballeros como González. ¿Qué es más grave?