l Ayuntamiento de Pamplona acaba de publicar un estudio sobre la situación de las personas mayores, que sitúa en 44 años la edad media de la población empadronada, en 83,8 la esperanza de vida y que a lo largo de 400 páginas recoge mil datos más, entre los que sorprende el número de servicios y colectivos de todo tipo asentados en algunas zonas. Con sólo 11.500 vecinos, el Casco Viejo debe ser considerado el gran acogedor. Aquí hay de todo, propio y -más que ajeno- externo: 8 asociaciones educativas, 25 de índole social, 8 de cooperación al desarrollo, 9 de medio ambiente, otras tantas de mujeres y 6 LGTBI+. En sus calles están establecidas 14 entidades deportivas, pero carecen de un mísero polideportivo, y tienen su espacio 22 colectivos religiosos y parroquias, 7 asociaciones de mayores, 25 de tipo profesional, sindical o partidista y nada menos que 86 grupos socioculturales. Todo ello, sin olvidar las 13 entidades de salud y bienestar que han buscado también un hueco en este barrio que, si bien cuenta con un Centro de Salud, desde hace tiempo demanda sean cubiertas las plazas de Pediatría. Será porque el Casco Viejo ha sido y es lugar de acogida, pero ahí están sus vecinos esperando con los brazos abiertos a los médicos especialistas que atiendan a sus chiquillos.
