as tesis más pesimistas dicen que la pandemia va a ser una buena estocada a la ya deprimida natalidad que desde 2008 (año en el que por ejemplo Navarra superó los 7.000 nacimientos, cifra que había que buscar en los años del babyboom) tira a la baja irremediablemente. El año pasado nacieron aquí 5.369 bebés, 29 menos que el año anterior, 377 menos que hace dos y más de 500 menos que el anterior. Como dicen los demógrafos a este paso no nos llega para el relevo generacional. Por eso, la llegada al mundo de un bebé, como en este caso de Fermín y de aquellos que están en camino, es una gran noticia que merece un sin fin de aplausos y celebraciones, por el momento virtuales y comedidas por exigencia de las circunstancias. Una gran noticia para sus familias pero también para el conjunto de la sociedad. Fermín, como sus coetáneos y coetáneas, pertenece ya a la generación covid, a una generación que está llamada a resolver muchos entuertos y a transformar esta sociedad que a base de abusos hemos hecho añicos. La pandemia del coronavirus es la peste que nos ha tocado y seguro que esta generación covid nos va a enmendar la plana porque nos va a enseñar a vivir de forma más saludable, más respetuosa con el entorno y al menos tan felices como nos ha hecho su nacimiento. Pero mientras esta generación va naciendo y creciendo, quienes tenemos la obligación de poner freno y revertir esta crisis somos los ya crecidos. Dicen que no es eficaz apelar a la responsabilidad individual quienes parece que solo quieren prohibición y vigilancia policial, algo más propio de otros tiempos. Pero quien confía en las personas lo tiene claro: Si estás a la espera del resultado de PCR en tu entorno, no compartas espacios; si estás confinado aunque seas asintomático, quédate en casa; si te están pidiendo que estés con un máximo de seis personas haz caso, por algo será. Si te dicen que la mascarilla protege, póntela; si la covid no te asusta por tu lozana juventud, piensa en los vulnerables... todos estamos perdiendo mucho y la generación covid merece un entorno saludable para crecer feliz, cambiar todo esto y alegrarnos la vida.