Durante los pasados meses tuvimos que soportar el mal tiempo, que se manifestó en unas temperaturas demasiado frías y en unas precipitaciones que parecía que no iban a remitir. Ahora, por contra, sucede lo contrario: se están sucediendo días de sol y de bastante calor. En esta tierra no hay quien se aclare con el tiempo. Tan pronto una semana tienes que usar botas y paraguas, como la semana siguiente tienes que ir en bermudas y manga corta.
¡Qué le vamos a hacer! Los navarros tristemente tenemos que acostumbrarnos a esto.