a irrelevancia es uno de los peores lugares, si no el peor, de la política. El cuarto oscuro de los castigos infantiles al que nadie quiere ir. Y es peor aún si una suma de errores propios te sitúa en ese triste ningún sitio político. Los ordagos son jugadas de alto riesgo. Casado lanzó un ordago a Sánchez anunciando que no apoyaría la prórroga del estado de alarma e insinuando su disposición a votar en contra. A Casado le llevaban días comiendo el tarro quienes alimentan la guerra sin cuartel hasta recuperar el poder. Y Casado cedió a las presiones, quizá pensando que la falta de acuerdo con el PNV y ERC dejaba a Sánchez a su merced. Error de principiante o de pésimo jugador de mus. Es lo que tiene claudicar ante quienes no se juegan nada y si fallan, cosa que ocurre a menudo, miran para otro lado. Sánchez aceptó el ordago, jugó sus bazas con el PNV, incluso se acercó a ERC de nuevo, y ganó con la carta oculta de Ciudadanos. Si el objetivo era mostrar a un Sánchez debilitado y a Casado como una alternativa fuerte, el resultado ha sido desastroso. No hay hoy alternativa al Gobierno del PSOE y Podemos, Sánchez ha modificado el eje político de sus apoyos con el acuerdo con Ciudadanos sin dinamitar los puentes con ERC y Casado ha llevado al PP a la irrelevancia y suma una nueva derrota personal a sus anteriores fracasos electorales. El PNV ha vuelto a demostrar el valor de su capacidad de negociación y Arrimadas reaparece en la escena política de Madrid. Todo ello deja como resultado un Gobierno de PSOE y Podemos con apoyo del PNV y Ciudadanos, otro ejemplo de la complejidad de la política española. Y en todo ese barullo político en Madrid, UPN se ve arrastrado por el PP a su propia irrelevancia en el inoperante proyecto de Navarra Suma. Una pinza entre Ciudadanos apoyando a Sánchez y la competencia por la ultraderecha de Vox, con los dos diputados de UPN absteniéndose de la mano del PP tras otra triste intervención pensada para votar no. Nada de eso le otorga utilidad y protagonismo en Navarra. Se ve venir desde hace tiempo.