la economía para qué? Es una de las preguntas que más frecuentemente me hacen los alumnos y alumnas. Siendo profesora de Economía desde hace 20 años, en lo que continúo, todos los años me enfrento al reto de hacer atractiva esta materia que en general se percibe como algo lejano. Algo similar ocurre con el tema que me ocupa en mi función pública como concejala de EH Bildu en el Ayuntamiento de Pamplona-Iruñea. Los presupuestos y sus modificaciones, las cuentas, las inversiones financieramente sostenibles o las ordenanzas fiscales no tienen tanto eco en la realidad de la actualidad municipal. Y, sin embargo, son herramientas indispensables para la gestión de la ciudad.

Este año, el debate de las Ordenanzas Fiscales y Precios Públicos para 2021 viene marcado, como no podía ser de otra manera, por la crisis ocasionada por la covid-19. Decía la concejala de Hacienda del Ayuntamiento, la señora Echávarri, que, debido a esta crisis, no es momento de hacer grandes cambios. Sin embargo, desde EH Bildu creemos que, precisamente por la covid-19, es momento de ser prudentes pero ambiciosos, de pensar creativamente y de proponer. Sobre todo de proponer para mirar hacia delante de una manera más esperanzadora.

Por ello hemos presentado una estrategia fiscal cuyo objetivo es el de mantener la capacidad de recaudación del Ayuntamiento para gasto social, consolidar las competencias municipales para poder ayudar a las personas que peor lo están pasando, además de ampliar la capacidad del Ayuntamiento para generar nuevas fuentes de financiación.

El grupo EH Bildu presentará varias iniciativas al debate del anteproyecto de modificación de las ordenanzas fiscales y las normas de precios públicos para 2021, de las cuales la primera es una enmienda para mantener el cobro de tasas por ocupación de la vía pública a las terrazas hosteleras. ¿Pero eso no perjudicará al sector hostelero, tan golpeado por la crisis?, se preguntarán muchas personas. Efectivamente, EH Bildu colaboró en la decisión de suprimir la tarifa de terrazas hasta finales de este año, propuesta en junio pasado como una medida de alivio inicial para este sector. Sin embargo, a día de hoy esta medida es muy parcial, porque solo beneficia al 20% del sector, que es el que dispone de terrazas y deja fuera a los locales hosteleros que no disponen de terraza.

Por ello, en EH Bildu apostamos por una medida más ambiciosa y con mejor impacto, que pasa por mantener el nivel de recaudación para que el Ayuntamiento disponga de suficientes recursos, y destinar los 450.000 euros que supone esta tasa para crear una bolsa de rescate de la economía local en la que también incluiría al sector de la hostelería y que se complementaría con el ahorro municipal, para redistribuir este dinero de manera más equitativa; revertirlo en ayudas a locales de todo tipo, que estén en riesgo de cierre. Además, creemos que se deben fomentar nuevas fórmulas para la implantación de terrazas que permitan trabajar a la hostelería también este otoño-invierno, además de buscar soluciones imaginativas también para la hostelería sin terraza. Por ello, por nuestra parte apostamos por atender a las demandas de mejora en instalaciones (veladores, toldos, estufas€) como lo pide este sector, para continuar con su explotación. No tanto con medidas paliativas sino constructivas, tal y como también lo defienden desde Anapeh, Asociación Navarra de Pequeña Empresa Hostelera.

En segundo lugar, y como complemento a estas medidas, plantearemos la modificación de la normativa foral en el Parlamento para permitir que ayuntamientos como el de Iruñea puedan bonificar impuestos de carácter general como la contribución para los sectores más vulnerables de la sociedad como personas en situación de desempleo, afectadas por ERE o ERTE o familias con rentas bajas; o en el impuesto de circulación de los vehículos industriales, destinado a aliviar a las pequeñas empresas.

Finalmente, creemos que es necesario aplicar un impuesto a la vivienda vacía para bancos, promotoras y grandes inmobiliarias de cara a aumentar los recursos del Ayuntamiento y facilitar que estas viviendas salgan al mercado de alquiler y controlar los precios. Para ello, elevaremos al Gobierno de Navarra una petición para que acelere el proceso de elaboración del censo de viviendas vacías para, en lo referente a Iruñea, tenerlo disponible para el mes de diciembre y poder poner en marcha este impuesto recogido ya en las ordenanzas aprobadas por el gobierno del cambio en el último año de su legislatura (2018).

Se trata, por tanto, de una estrategia integral que busca mantener la capacidad económica del Ayuntamiento, en la medida de lo posible, para poder sostener los servicios públicos básicos; abrir una línea de bonificaciones fiscales para las personas más afectadas por la crisis del covid y aumentar las líneas de financiación municipal con impuestos a las grandes corporaciones que retienen las viviendas vacías. El objetivo es reforzar la autonomía municipal, garantizar la implicación de la institución en que nadie se quede atrás por esta crisis e implantar la carga fiscal de una manera progresiva, pagando más quien más tiene. No se trata de teoría económica, se trata de sentido común.

La autora es concejala de EH Bildu en el Ayuntamiento de Pamplona-Iruñea

Creemos que, precisamente por la covid-19, es momento de ser prudentes pero ambiciosos, de pensar creativamente y de proponer

El objetivo es reforzar la autonomía municipal, garantizar la implicación de la institución en que nadie se quede atrás por esta crisis