Qué importante me parece el deporte en el desarrollo vital de una persona, necesario diría yo, y no sólo para el desarrollo, cuidado y potenciación de su aspecto físico, sino porque el deporte viene acompañado de valores tales como esfuerzo, sacrificio, disciplina, espíritu de superación, compañerismo y respeto hacia todos aquellos que te acompañan en el camino: entrenadores, compañeros de equipo, rivales, árbitros, etcétera. El otro día le escuché al exciclista profesional Juanjo Oroz, actual team manager del equipo Kern Pharma, cómo recordaba cuando con 9 años y de la mano de su padre, fue a apuntarse al equipo ciclista del villavés, y como quien le recibió y le entrenó en ese equipo fue el mismo que le recibió y entrena a su hijo en ese mismo club formador de personas y deportistas.
Qué importantes somos los padres y los entrenadores para estos pequeños deportistas. Leyendo últimamente la prensa me emociona ver cómo un niño todavía de 15 años, después de quedar campeón del mundo cadete de waterpolo, dedica ese título tan extraordinario a su entrenador Fermín Manso, que fue también entrenador de su hermano, actual jugador de división de honor de ese mismo deporte y de tantos otros deportistas. Fermín nos dejó hace unos meses, pero su memoria y los valores que le acompañaron se reflejan en el agua que llena las piscinas y que le vieron entrenar y acompañar a sus equipos por todo el país. Y ese recuerdo hacia su entrenador de un niño de 15 años después de ganar nada más y nada menos que un campeonato del mundo es lo que demuestra que lo estamos haciendo bien. Por supuesto que hay excepciones en este acompañamiento a nuestros pequeños deportistas. Recientemente el Waterpolo Leioa, a fin de ahorrar costes en el traslado de sus equipos a Pamplona, solicitó al Waterpolo Navarra el cambio de los señalamientos de varios partidos de sus equipos infantil, cadete y juvenil para poder jugar todos en un mismo día. Por supuesto el equipo pamplonés aceptó, no podía ser de otra manera. El sábado se jugaba la final de la liga senior, y entre los convocados estaba con tan sólo 15 años Yohan Arizaga, quien su entrenador consideró que debía estar con sus compañeros en ese partido. Posteriormente el domingo se jugaron los partidos atrasados de otras jornadas, entre ellos el de la liga cadete y juvenil masculino, y el chaval volvió a participar en ambos encuentros. Es algo habitual que en el waterpolo, tanto femenino como masculino se jueguen más de un partido en un mismo fin de semana, en este caso Yohan jugó tres, y hay una norma en la liga vasca, organizadora de estos torneos, en la que un deportista no puede jugar tres partidos en un mismo fin de semana, si bien, dicho sea de paso, esa norma no está acompañada de ningún tipo de penalización. Aprovechando dicha circunstancia el Waterpolo Leioa, y pese a la deferencia que su rival tuvo con ellos a la hora de juntar varios partidos en un mismo día, recurrió ante la federación vasca dicha alineación y solicitó la pérdida del partido de juveniles del equipo navarro y que se le dieran los tres puntos al equipo vizcaíno. Llamativo resulta que el presidente del Leioa es a su vez presidente de los árbitros de la federación vasca y árbitro en ejercicio.
Finalmente la federación vasca decidió dar los tres puntos a los leiotarras en perjuicio de los navarros y del equipo de Irún que estaba ya matemáticamente clasificado para participar en los Campeonatos de España juvenil de segunda categoría. Posteriormente la piscina puso a cada equipo en su sitio, y en un último enfrentamiento el equipo de Irún venció al Leioa consiguiendo esa merecida clasificación. Al equipo navarro por su parte le fue arrebatado el título ganado en las piscinas, y por ende la clasificación lograda para el Campeonato de España juvenil de primera categoría, el fin de esta historia lo resolverá el comité de apelación….
Félix Jáuregui, actual entrenador de los navarros, considera que para que un pequeño deportista pueda convertirse en el día de mañana en un deportista de esos que peleen con los mejores del mundo, previamente tienen que aprender a perder con los mejores, y en mi opinión los mejores están siempre en las piscinas, no en los despachos…., todos sabemos qué hay en los despachos.
Cuando un niño de 15 años se acuerda de su entrenador recientemente fallecido, algo estamos haciendo bien.
Felicidades a Yohan, a todos los que le rodean, felicidades a las navarras del 9802 que recientemente han conseguido ese ansiado ascenso a división de honor, felicidades a las chicas del equipo infantil de Larraina, cuartas clasificadas en el Campeonato de España de su categoría, y felicidades a todos aquellos deportistas a los que se les iluminan los ojos con su deporte….
Algo estamos haciendo bien…
El autor es padre de dos waterpolistas de Waterpolo Navarra