"He aprendido mucho y ahora no me veo inferior ni superior a ningún compañero"
En Huesca le fueron bien las cosas el año pasado y llega más despejado, con las ideas más claras, consciente de que tiene una buena oportunidad por delante, tal vez la última en Osasuna. Pero no quiere agobiarse y afronta la pretemporada como una forma de demostrar su valía
pamplona. Jokin Esparza fue otro de los canteranos que necesitó emigrar la pasada temporada a la búsqueda de esos minutos que en Pamplona no iba a disfrutar y que tanto necesitaba para tener una oportunidad de jugar en Primera División. No se hace ilusiones, pero sabe que en la plantilla no abundan los jugadores en su posición y está dispuesto a trabajar duro en los entrenamientos para que Mendilibar se lo tenga que pensar. Lo demás, dependerá de él.
¿Cómo marcha la pretemporada?
Están siendo unas sesiones duras. Es bueno que a principio de la temporada nos metan mucha caña, que sean entrenamientos intensos. Nos vendrá bien para poder empezar con buen pie la temporada.
¿Se plantea esta pretemporada de una forma diferente a otros años?
Vengo con muchas ganas de quedarme en el primer equipo, vengo con otra mentalidad, con otra idea después de haber tenido una buena temporada y haber jugado muchos partidos. Ahora lo que quiero es demostrar aquí todo lo que demostré en Huesca.
¿Cree que juega a su favor el hecho de que en el equipo escaseen los interiores puros?
Sí, el año pasado ya me tocó jugar por las dos bandas y es verdad que no hay mucha gente en ese puesto. Trataré de aprovechar los minutos que me dé el míster en esta pretemporada y decirle 'aquí estoy yo'.
¿Cómo le planteó el club la opción de volver para realizar la pretemporada con el primer equipo?
Tenía varias propuestas y en Huesca se quedaron muy contentos, pero mi primera opción siempre fue volver a Osasuna para demostrar mi valía. No fue una decisión que tuve que tomar ni pensar, sabía lo que quería, hablé con el club, que estaba encantados de que me viera el nuevo entrenador, y acepté.
¿No le afecta el hecho de que sean varias las pretemporadas que ha hecho con el primer equipo y no poder hacerse con un hueco?
La verdad es que llevó aquí varias pretemporadas, pero creo que este año, física y psicológicamente, me veo capacitado para aportar cosas al equipo. Otros años sí que mentalmente me podía encontrar más frágil, pero ahora llego en un momento muy bueno.
¿Se ve con un sitio en esta plantilla?
Sí. He aprendido muchísimo y ahora no me veo inferior ni superior a ninguno de mis compañeros. Hay un nivel muy bueno, la competitividad es muy alta y trataré de aportar lo mío.
¿Cuál considera que es el aspecto que más ha podido progresar en este año de cesión?
Pienso que el uno contra uno, la velocidad, y espero que lo pueda demostrar aquí. He ganado en poso en el campo y son los minutos los que me han dado esas confianza. Me veo tranquilo y sereno.
¿Le ha comentado el entrenador qué espera de usted?
No, la verdad es que no hemos hablado personalmente, nos ha dicho que trabajemos con ilusión y con ganas y que no pensemos en el mañana, solo en el día a día.
¿Salió satisfecho del amistoso del martes en Logroño?
Sí, me encontré bien. Fue el primer partido con todos los compañeros y, aunque pudo faltar entenderse algo mejor con la gente de arriba, estamos empezando. Ahora tenemos que seguir trabajando en el aspecto físico para que en el partido tomemos las mejores opciones.
¿Qué es lo que más destacaría de José Luis Mendilibar?
Es un tío muy cercano. Te corrige, te habla, te chilla, te da confianza y te da moral para superarte. Se preocupa y se nota.
¿Cómo afronta los amistosos que tiene el equipo en la gira de Italia?
Con mucha ilusión de estar cada día mejor y verme ahí arriba con oxígeno en la cabeza para decidir mejor. Quiero aportar mi granito de arena y ser uno más.
¿Piensa que puede ser su última oportunidad en Osasuna?
Nunca se sabe, pero no lo veo así y no me lo planteo como si me lo jugara todo a una carta. Esto todavía puede dar muchas vueltas. Pienso que ese poso que he adquirido me va a ayudar y trataré de hacerlo todo lo bien que pueda.