pamplona. A marchas forzadas sigue la puesta a punto de José Luis Mendilibar y sus jugadores en Tajonar, donde el entrenador programó ayer una doble sesión de trabajo en la víspera del segundo amistoso de la pretemporada, el que le enfrentará esta tarde el Eibar en Lerín a partir de las 19 horas.
La sesión matinal de trabajo tuvo una duración de hora y media, durante la cual los jugadores rojillos realizaron largas sesiones de rondos, posesiones y partidos a cuatro porterías. El único jugador que no se pudo entrenar con el grupo fue el lesionado Masoud, que ayer se dejó ver en Tajonar.
Llegó acompañado por Neko y lo hizo ayudado por un par muletas, ya que el jugador iraní, como informó el miércoles el jefe de los servicios médicos, Patxi Cipriáin, tendrá que estar un mes más con su pie izquierdo inmovilizado para recuperarse de la fractura del quinto metatarsiano y de las posteriores complicaciones habidas durante el postoperatorio. El jugador aseguró encontrarse bien de ánimo y confiando en que la evolución siga siendo positiva, aunque dijo estar con muchas ganas de dejar las muletas y comenzar a trabajar en Tajonar.
Por lo que se refiere al segundo amistoso de la pretemporada (el primero fue el martes en Logroño y acabó con victoria por 0-3), Osasuna tratará de seguir afinando la preparación ante un rival que nunca da facilidades. Pero antes del partido, la plantilla tendrá hoy otro entrenamiento matinal.