pamplona - En Sanfermines, Osasuna no va a tener descanso. El nuevo entrenador de Osasuna, Jan Urban, va a encontrarse con una plantilla remozada y, aún, en movimiento porque a los numerosos futbolistas que se han marchado se unirán en breve otros que deben dejar algún rédito económico en las arcas del club.
Sin posibilidad de hacer fichajes mientras no se solventen las deudas con los clubes -dos millones de euros correspondientes a operaciones no saldadas con Sporting (De las Cuevas), Alcorcón (Oriol Riera), Real Madrid (por los derechos de formación del ahora internacional Juanfran), Atlético de Madrid (De las Cuevas), Universidad Católica (Gato Silva) y Schalke (Annan)-, a Osasuna solo le queda tirar con lo que tiene y subir futbolistas del filial. Maikel Mesa es una de las incorporaciones seguras procedentes del Promesas -así lo dice su contrato y lo ha ratificado su rendimiento sobresaliente-, pero será luego el nuevo entrenador quien tenga que decidir por alguno de los del filial.
A expensas de las decisiones de Urban y su segundo, Kibu Vicuña, Osasuna tiene unas cuantas ideas claras. Para hacer caja es necesario vender jugadores y con este cartel se encuentran Andrés Fernández, Alejandro Arribas y Gato Silva. Los dos primeros suenan para el Getafe -se ha parado la opción del Oporto- y el segundo, para el fútbol alemán. Por De las Cuevas tuvo la hay otra oferta por él tras no haberse concretado otra anterior. En el peor de los casos, quizás sea otro de los jugadores a los que se conceda la carta de libertad -como a Armenteros-, para administrar más el ahorro que una venta no factible. Por Cejudo, otro a los que se le pone equipos cada semana -ayer se le colocaba en el Córdoba, a la vez que se hablaba de un presunto interés del Elche-, la realidad es que no hay ofertas. En el caso de que por Andrés no hubiese una propuesta apetecible, la salida de Asier Riesgo y la permanencia del portero murciano en Pamplona es otra de las opciones.
Osasuna puede encontrarse también con una salida no prevista, pero para la que obligatoriamente deberá haber traspaso de por medio. Sisi no hace ascos a regresar al Valladolid, club del que se marchó venerado y como capitán del equipo que logró el ascenso hace un par de temporadas. En esta nueva andadura en Segunda, su retorno no es descartable, pero aquí sí que Osasuna deberá imponer la fuerza del contrato, y cobrar.
El nuevo técnico ya sabe que contará con dos jugadores cedidos en equipos de Segunda y que regresan a Osasuna, como Echaide (Hércules) y Timor (Girona), y que el jugador procedente del Racing Mamadou Koné reforzará la delantera. El futbolista marfileño ha hecho buenos números en Segunda B, con 18 goles en Liga y tres en la Copa, y es un jugador rápido y joven, con proyección. Tamayo, fichado del Alcorcón, en principio se iría al Promesas.
La comisión gestora anunció el viernes que están contactando con jugadores que han terminado contrato con el equipo pero que se consideran válidos para el proyecto en Segunda. Evidentemente, con una notable rebaja salarial, futbolistas como Lolo -se le asocia ahora con el Recreativo-, Satrústegui e incluso Nino podrían participar de esta situación. Damiá tiene previsto acudir al primer día de entrenamiento porque su contrato quedó prorrogado. Queda puzzle.
Los que vienen. Terminan sus cesiones Echaide y Timor, llegan fichados Koné y Tamayo.
En el mercado. Andrés, Arribas, Gato Silva y De las Cuevas.
Interés en que vuelvan. Lolo, Satrústegui y Nino.
Los que están. Andrés, Asier Riesgo y Cantero (porteros); Joan Oriol, Miguel Flaño, Arribas, Oier, Loties, Damiá, De las Cuevas, Sisi, Cejudo, Silva, Roberto Torres, Raoul Loé y Manu Onwu.
Mateo para el Promesas. José Manuel Mateo puede ser otro de los nombres que regresen a Osasuna. Tras su salida del club hace un año, el que fuera entrenador del juvenil de Osasuna y esta temporada del filial del Alavés podría llegar ahora a Osasuna Promesas.