Pamplona - El Numancia se ha metido en la zona alta de la clasificación con uno de los costes de plantilla más bajos de la categoría. El conjunto soriano, que es un ejemplo de gestión económica sensata -mientras Osasuna se retorcía con sus líos judiciales y le salían deudas fiscales por todas partes, el club castellano pagaba sus impuestos y veía cómo no podía competir con otros en el mercado de jugadores-, está entre los conjuntos más solventes de esta primera vuelta del campeonato y, aunque este torneo se antoja eterno y el mes de junio queda lejísimos, quizás esté sembrando para un final de curso de ensueño.

El Numancia tiene el tercer coste de plantilla más bajo de la Segunda División que, según datos facilitados por la Liga, se sitúa en 4,57 millones de euros. Sólo el Reus, con 4,53, y el Lorca, con 3,77 millones, se sitúan por debajo de este límite obligatorio para los sorianos a la hora de invertir en su plantel. El gasto máximo de la plantilla de Osasuna, siempre según datos de la Liga, se sitúa en 13,25 millones, tres veces más.

La labor del entrenador, Jagoba Arrasate, y del director deportivo, César Palacios, indudablemente se debe notar en este buen hacer en el torneo. Palacios, que pasó de ser jugador importante del Numancia a ser enrolado a las labores técnicas del equipo, está sacando chispas al conocimiento de la idiosincrasia del club soriano y también está pulsando con su sensatez proverbial -la que tenía en sus tiempos de futbolista rojillos- las necesidades y los nulos lujos que se puede permitir el equipo.

Cuarto en la clasificación con 31 puntos -a dos del líder, a seis de Osasuna, que tiene un encuentro menos pendiente en su historial-, el Numancia está siendo solvente en su estadio -donde ha sumado 21 puntos, los rojillos llevan 13 en El Sadar- y más que correcto fuera -ha obtenido diez, tres de los cuales fueron en una remontada de dos goles en contra en Valladolid (2-3)-.

Con jugadores suministrados de equipos con muchas mimbres -caso del Athletic, Eibar-, tipos expertos en el fútbol -Manu del Moral, Ripa, los hermanos Valcarce, Diamanka- y conocedores de la categoría no exentos de calidad -ahí siguen el pamplonés Íñigo Pérez o el incombustible Julio Álvarez-, futbolistas como Manu del Moral (4 goles) o Guillermo (5) -cedido por el Athletic- están sustentando con su puntería esta marcha exitosa.

La guinda de este primer tramo de curso excelente la pone su participación en la Copa, en la que se ha clasificado para los octavos de final. Al equipo soriano ya le han hecho el año económico porque les tocó en el sorteo el Real Madrid y el 4 de enero en Los Pajaritos va a estar todo vendido.