pamplona - Sara Carrillo (20/08/2002; Arnedo, La Rioja) fue incorporada el pasado junio a la plantilla del primer equipo de la Fundación Osasuna Femenino, procedente del Padrejón. Pese a tener 16 años se ha ganado su puesto en el equipo dirigido por Mikel Bakaikoa y que el pasado fin de semana consiguió el ascenso a Primera División B. Este domingo, se verá las caras con el Eibar en El Sadar, para tratar de conseguir la segunda posición en la tabla.

Tiene 16 años, ¿cuántos lleva jugando a fútbol?

-Con chicas este es el tercer año, pero antes jugaba con chicos y estuve como seis años. A nivel un poco más serio diría que tres, desde que empecé a jugar solo con chicas.

Esta es su primera temporada en Osasuna, y viene del Padrejón, equipo con el que debutó en Segunda División. Y menos de un año después se encuentra en un gran club con el que hace solo un par de días ascendieron a Primera División B.

-Estoy feliz, pero por lo joven que soy quizás no soy tan consciente de haber subido a Primera B y por eso igual no lo valoro tanto como por ejemplo mis compañeras o toda esa gente que lleva más años en esto y que saben lo que cuesta llegar a este punto. Como soy más jovencita me limito a disfrutar al máximo de los partidos y a ayudar en todo lo que pueda en el campo.

¿Qué opina de todo lo que le está tocando vivir al fútbol femenino en Osasuna?

-Creo que el fútbol femenino está viviendo un crecimiento enorme y todo viene a raíz de los triunfos que ha empezado a conseguir la Selección Española, que ahora ha sido más visible, se han emitido partidos en la tele... Este año Osasuna ha propuesto mucho y desde el club están haciendo cosas súper bonitas con nosotras. En diciembre jugamos un amistoso en Ipurua y volver a jugar contra ellas, en El Sadar y jugándonos algo importante como la segunda plaza después de todos los meses que llevamos trabajando para conseguirlo es algo muy bonito.

¿Cómo se siente en su nueva casa?

-Me siento súper bien. Además los directivos vienen a vernos, Tito, el responsable deportivo siempre está apoyándonos en todos los partidos. Nos sentimos valoradas dentro del club. Por supuesto siempre hay cosas y somos conscientes de que dependemos del masculino pero creo que desde el club se le quiere y se le está dando mucha bola al fútbol femenino.

El apoyo del club lo tienen, ¿y el de la afición?

-Eso se verá el domingo en el partido, espero que lo tengamos porque nosotras también somos Osasuna. No solo queremos que vengan para ver el partido sino para que nos animen y nos apoyen.

¿Qué supone jugar en El Sadar y qué sensaciones tiene?

-Yo quizás no sé lo que conlleva jugar en un estadio tan grande pero sé que mis compañeras que son de aquí, navarras, que Osasuna siempre ha sido su equipo y su referente pues tener la oportunidad de jugar en el Sadar y contra un equipo como el Eibar es un sueño y una ilusión muy grande para ellas más que para mí.

Lleva 15 goles en lo que va de temporada. ¿Qué le dice esa cifra?

-Me dice que estoy mejor que el año pasado y eso también es bueno porque significa que ayudo al equipo. Estar en un equipo con más nivel y con compañeras que ofrecen más es muy bueno, aunque en Padrejón también fue una temporada increíble.

¿Qué ha cambiado del Padrejón a Osasuna?

-Sobre todo se nota la exigencia, ahora entrenamos cuatro días a la semana y el ritmo de vida y entrenamientos que llevo es mucho más intenso. Antes no me tomaba tan en serio el fútbol, ahora sí.

¿Qué objetivos tiene para lo que queda de temporada?

-A nivel individual intentar ayudar al equipo en lo máximo que pueda ya sea con goles, con pases, ayudando en el vestuario... También llegar al partido del Alavés con posibilidades de ganar y obtener el primer puesto en la tabla. Y tampoco tengo que olvidarme de la fase final con la selección navarra del campeonato de selecciones autonómicas que será dentro de muy poco. Sobre todo eso.

¿Cuál es su mejor momento en Osasuna en lo que lleva de temporada?

-Creo que uno de los mejores momentos fue el volver de navidades, ganar al Athletic y ponernos por delante de ellas. También la llamada con la selección española y conseguir el pase a la fase final con la selección navarra. Enero y Febrero han sido unos meses llenos de cosas buenísimas. Fue brutal.

Es muy jovencita y comparte vestuario con chicas que incluso le doblan la edad.

-Cuando llegué vine tranquila porque sabía que las veteranas nos iban a poner las cosas más fáciles. Ellas saben que es complicado llegar a un vestuario en el que no conoces a nadie y ahí te das cuenta de que todos somos personas, da igual la edad, y muchas veces disfrutan ellas igual que yo siendo yo una niña, porque es lo que soy. En partidos que son más serios y en donde influyen más cosas que el fútbol siempre las mayores te dan esa tranquilidad, te dicen que tengas cabeza, que aún queda mucho.

¿Cómo se considera como futbolista?

-Creo que soy una persona que con lo poco que ha vivido y la poca experiencia que tengo muchas veces no soy consciente de cuando viene un partido importante, quizás no tengo esos nervios que pueden tener otras personas y yo sé que cuando salgo al campo, cualquier nervio que pueda tener se me pasa. Solo pienso en que mis compañeras van a estar conmigo, en que estoy en un sitio en el que no cualquiera puede estar, y creo que a pesar de ser joven tengo cierta madurez en el campo. La llegada a puerta y el tiro creo que son las cosas que más me pueden definir.

-¿Y como persona?

-Realmente soy súper tímida aunque muchas veces no lo pueda parecer. Soy amiga de mis amigas, en ese sentido soy muy leal a los míos, a los que me ayudan todos los días y muy familiar.

Ha llegado a un club grande y ya empieza en el fútbol profesional. Seguramente como adolescente le gustará salir con sus amigas pero, ¿hay algo a lo que haya tenido que renunciar o que le limite un poco más?

-Sí, quizás el año pasado me tomaba algo menos en serio el fútbol, porque estaba en un equipo que no me ocupaba el tiempo que ahora mismo me ocupa Osasuna por lo que igual salía más de fiesta, comía peor... las cosas que se hacen a mi edad. Ahora salgo menos, cuando salgo vuelvo antes a casa, como de una manera mucho más responsable. En definitiva, hago lo mismo pero de una manera más responsable y consciente porque sé que al día siguiente o tengo entrenamiento o tengo partido y tengo que tener cabeza para no pasarme de los límites.

¿Qué le gusta hacer en sus días libres?

-Sobre todo me gusta descansar, estar con mis padres, con mi perra, cuando puedo veo a mi hermano que vive lejos y lo echo de menos, pasar el día con mis amigas pero sobre todo descansar porque durante la semana te quedas sin horas para ello.