- Los jugadores de Osasuna ya se debían imaginar que el retorno a los entrenamientos iba a tener su parte de ritual porque las rutinas, en este tiempo de actividad controlada y vigilada para regatear a la enfermedad, resultan obligatorias. El regreso del grupo se ha completado sin sobresaltos y de lo que se trata es de aquí siga, con esta monotonía obligatoria que tiene que ver con el paso de los días sin malas noticias, con la limitada actividad que protagoniza cada uno en soledad.

Y así, la plantilla de Osasuna culminó su segunda jornada de trabajo en Tajonar. Según explicó el club, el cauce oficial para enterarse de lo que pasa puertas para dentro, el conjunto prosiguió con el plan del viernes, "consistente en que los futbolistas se familiaricen con esa nueva forma de trabajar y vayan adquiriendo su nivel físico y técnico antes de pasar a la siguiente fase de entrenamientos por grupos".

Ayer, la rutina en Tajonar fue la misma que el día del retorno, aunque el tiempo total de los entrenamientos fue más corto debido a que la hora de llegada de los deportistas se espació en cinco minutos en lugar de diez. Así, la sesión con el primero dio comienzo a las 8.30 horas y concluyó en torno a las 12.15. Como mandan las normas del regreso, los futbolistas se pesaron antes de completar un circuito diseñado por los técnicos, también en esta ocasión activación y trabajo de prevención, y después técnica, cambios de dirección y tareas de resistencia física. Tras estas dos primeras sesiones, los futbolistas tienen hoy jornada de descanso y la próxima semana afrontarán seis entrenamientos, todos ellos individuales -explica Osasuna-. Los primeros están citados a las 8.30 horas.

El protocolo establecido por la Liga para el retorno a la actividad de los equipos de fútbol determina que la fase de entrenamientos individuales se desarrollará durante dos semanas, por lo que los equipos seguirán con estas rutinas. No podrán interactuar. Podrán jugar con la pelota, hacer toques y conducciones, y disparos a portería sin portero, pero no podrán dar pases, tampoco con el técnico que les esté mirando. Los balones serán apartados y desinfectados cuando acabe cada jugador y antes de la llegada del siguiente.

Esta fase propia del fútbol profesional va con retraso respecto a lo que ayer se reguló. La posibilidad de entrenar en pequeños grupos en clubes de ligas profesionales es una de las grandes novedades de la Orden SND/399/2020 de ayer para la flexibilización de determinadas restricciones establecidas en el estado de alarma, durante la Fase 1 de la desescalada de la pandemia de coronavirus. En concreto, respecto a las ligas profesionales, los clubes pueden desarrollar entrenamientos de tipo medio, que consistirán en el ejercicio de tareas individualizadas de carácter físico y técnico, así como en la realización de entrenamientos tácticos no exhaustivos, en pequeños grupos de varios deportistas, hasta un máximo de diez, manteniendo las distancias de prevención. Desajustes en la desescalada.

Menos tiempo. La sesión de entrenamiento comenzó a las 8.30 horas y concluyó a las 12.15, antes del primer día. El intervalo de llegada de los jugadores a Tajonar se ha reducido y también el periodo global de trabajo.Mañana, el mismo plan. Los jugadores seguirán mañana con su plan de entrenamiento individual, manteniendo los protocolos de actividad físico y de salud.

Chimy, a su aire. El delantero no se entrenó ayer y continúa con su plan propio de preparación. La próxima semana se volverá a ejercitar por su cuenta en Tajonar.