Ziganda releva a Robinson

n el minuto 32 del partido que Osasuna y Sabadell disputaban en El Sadar el 13 de diciembre de 1987, Robinson sufrió una lesión y Pedro Zabalza decidió que era el momento de Kuko Ziganda. El delantero tenía 21 años y traía el aval que en ese momento le acreditaba como el más certero rematador de Segunda B: 12 goles en 14 partidos con el Promesas. Su irrupción en Primera provocó mucho ruido porque marcó tres goles en las cuatro jornadas siguientes. En junio de 1991 el Athletic pagó la cláusula de 150 millones de pesetas (unos 900.000 euros) y le hizo una oferta que no podía igualar Osasuna. Regresó en 1998 para vestir de rojo sus tres últimos años. Con 63 goles en 210 partidos es el quinto mejor realizador en la historia de Osasuna.