- La victoria que consiguió ayer Osasuna en Cádiz (2-3) se convirtió en la primera que logra el conjunto navarro en la presente temporada, después de dos empates sin goles consecutivos en El Sadar ante Espanyol y Celta, pero es la 450 de los rojillos en las 40 campañas (incluida la actual) que han militado en Primera División. En definitiva, un motivo más para dar mayor lustre a un triunfo que ya de por sí llegó con un montón de aderezos. Y es que el equipo de Jagoba Arrasate ganó en el Nuevo Mirandilla (denominación reciente del Ramón de Carranza) un partido con tres penaltis, dos de ellos señalados tras revisión del VAR, y una remontada épica liderada por Roberto Torres.

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Pero vayamos por partes, porque el duelo de ayer tuvo de todo. Para empezar, un dominio abrumador de Osasuna en la posesión de balón, sobre todo en la primera parte, pero que no se tradujo en ocasiones y mucho menos en goles. Al menos de los rojillos, porque el Cádiz fue el primero en golpear a la contra al aprovechar un robo de balón en el centro del campo, una cabalgada de Salvi Sánchez por la banda derecha, una buena maniobra de distracción de Negredo y un gol casi a puerta vacía de Álex.

Así se llegó al descanso, con ventaja para el conjunto local, una renta que niveló Osasuna merced a un claro penalti por mano de Akapo que, pese a todo, el árbitro solo señaló después de revisar la jugada en el monitor a instancias del responsable del VAR. Sin el especialista Roberto Torres en el campo y después de que Rubén García fallara uno el pasado lunes contra el Celta, fue Kike García quien asumió la responsabilidad para disparar desde los once metros y hacer el empate. Pero el Cádiz se volvió a adelantar con una pena máxima por mano de David García de la que el colegiado solo se percató en la repetición televisiva, otra vez a instancias del VAR.

Con cada vez menos tiempo para la reacción, Roberto Torres saltó al terreno de juego. Ya antes de asumir su rol protagonista en la victoria, conectó con Kike García, pero el remate del conquense se estrelló en el palo. Después, la épica. El centrocampista de Arre empató de penalti en el minuto 91 y en el 95 ejecutó a las mil maravillas un saque de esquina que David García envió a la red con un poderoso remate de cabeza en el segundo palo. 2-3 y primera victoria del curso. La 450 de Osasuna en Primera.