Osasuna completó ayer su penúltimo entrenamiento antes de recibir mañana lunes a partir de las 21.00 horas al Elche en El Sadar y lo hizo con una suave sesión en el interior de las instalaciones de Tajonar para evitar el mal tiempo que presidió la matinal de ayer, con frío, lluvia e incluso algunos copos de nieve.

Después de tres días exigentes en el plano físico, los futbolistas rojillos se ejercitaron ayer a través de un entrenamiento conformado por diferentes ejercicios diseñados por el cuerpo técnico, sesión en la que no participaron el meta Juan Pérez, que prosiguió con su trabajo específico para reponerse de su lesión, una rotura de fibras en el redondo mayor de su brazo derecho que ya le impidió estar el sábado de la pasada semana en el Wanda Metropolitano, ni Rober Ibáñez, que sigue confinado tras dar el lunes positivo en covid. A este respecto, Arrasate señaló ayer que "hemos vuelto un poco al pasado con un positivo y pruebas PCR para todos". "Hemos extremado un poco las medidas de no utilizar los vestuarios y no desayunar juntos", desveló el técnico, que hoy ha preparado otro entrenamiento a puerta cerrada en Tajonar.