Kike Barja ha demostrado por enésima vez su osasunismo y la pasión que siente por el club de su tierra. El canterano ha comparecido en rueda de prensa en El Sadar con motivo de su renovación por Osasuna hasta 2026, un contrato que espera alargar porque su intención es "no irme de aquí". El extremo de Noáin, que siente responsabilidad de "devolver con esfuerzo y dedicación todas las muestras de cariño" también ha aprovechado para valorar la situación del equipo, la que ha calificado como "óptima" porque "hay que saber también de dónde venimos".

Ha comenzado tomando la palabra Braulio Vázquez, que se sumado a los pésames por el fallecimiento de Jesús Riaño, así como ha mandado un mensaje de apoyo al exrojillo Borja Lasso, que este mismo martes ha anunciado que se ha visto obligado a dejar el fútbol.

El protagonista, por su parte, no ha escondido que es muy "especial para mí seguir muchos años aquí, soy muy feliz y para mí no hay nada mejor que estar aquí. Agradecer a mi entorno personal la confianza que me han demostrado siempre, en los momentos difíciles y para mi ampliar el contrato con Osasuna y estar más años me hace muy feliz y quiero responder con hechos, que hay que demostrarlo en el verde y me voy a dejar todo en el campo. Voy a tener la predisposición para ayudar siempre".

Barja, que entró en los planes del primer equipo de la mano de Diego Martínez, ha admitido haber tenido suerte porque "desde que he llegado al primer equipo el camino es idílico. Empecé a jugar con Diego, ascendimos con Jagoba, llevamos tres años en Primera y los jugadores jóvenes que vamos cumpliendo años tenemos que seguir dando pasos para que el día de mañana seamos el relevo de jugadores importantes como Oier Rober... que son un espejo en el que fijarme. Como canterano, como navarro, como jugador de aquí siempre quieres hacer una carrera como la de ellos porque son gente importante".

Sin embargo, para él no ha sido fácil dar el salto al primer equipo. En ese sentido, Barja ha desvelado que no ha habido ningún secreto, sino que es lo que le ha tocado y "si no hubiera afrontado los contratiempos no estaría aquí. He intentado ser perseverante, tener paciencia y esas son las claves. He tenido contratiempos pero el club de primer nivel te pone las cosas fáciles para recuperarte y he tenido la suerte de estar en un vestuario increíble en el que he sentido el cariño de todos y eso ayuda mucho a la hora de afrontarlos".

"Creo que cuando vas cumpliendo temporadas y partidos empiezas a demostrar que tienes un nivel para estar aquí y te genera confianza para dar cosas al equipo y los compañeros, el club y el míster también lo ven. Hay que ir dando pasos, tengo 24 años, soy joven, pero la realidad es que para mí está siendo todo muy fácil. Me encanta ir a entrenar porque me lo paso bien y con muchos compañeros tenemos una relación de amistad. Siento un gran cariño de la afición y eso es lo que más puedes valorar. Ayer me llegaron muchos mensajes de aficionados que les pone contentos que siga aquí y es la mayor motivación para querer seguir aquí", ha proseguido.

Sobre su peso en el once titular, Barja ha negado sentirse "titular porque el fútbol está cambiando con los cinco cambios. He estado un tiempo lesionado, hay rotaciones y para conseguir un objetivo necesitamos de todos y cada uno es ambicioso y competitivo, queremos jugar pero no tengo la etiqueta de titular. Somos 27, todos tenemos nuestros momentos y todos somos importantes. Lo importante es que en la jornada 38 tengamos el objetivo".

Osasuna destapó ayer su cláusula de 15 millones de euros, una cifra en la que el canterano rojillo no ha pensado "porque no tengo ninguna intención de no estar aquí. Son números que aparecen en los contratos, no les doy importancia", por lo que la negociación ha sido "fácil porque quiero estar aquí y me iba a adaptar a cualquier cosa, porque la relación que tenemos es muy sana, nos conocemos y tengo que agradecer el esfuerzo que se ha hecho para renovarme cuatro temporadas, que es un esfuerzo del club y no me puedo quejar del trato".

La entidad rojilla ha renovado en los últimos meses a Nacho Vidal, David García Javi Martínez, Moncayola, Sergio Herrera y al propio Barja, algo "importantísimo", porque si el equipo quiere "crecer como equipo y club hay que retener a jóvenes que tienen potencial e importantes. Creo que si queremos ser ambiciosos tenemos que tener a los mejores jugadores y en ese sentido se están haciendo las cosas muy bien".

El de Noáin, que se ve en Osasuna en 2026 y en la máxima categoría, ha avisado de que "tenemos que ser ambiciosos y conscientes de la dificultad de lo que conlleva eso. No tenemos que perder la perspectiva, llevamos tres años en Primera" al tiempo que ha reconocido que le gustaría jugar en Europa con el club de su tierra, pero "tenemos que tener los pies en el suelo, pero tenemos que ser conscientes de la dificultad del objetivo. Tenemos que pelear el objetivo, somos Osasuna, sabemos cuál es nuestra historia, sabemos de dónde venimos y tenemos que mirar ahí para ver que tenemos 22 puntos, estamos una posición óptima".

En cuanto a lo deportivo, para Barja "puede ser una responsabilidad para devolver esas muestras de cariño. Tienes esa responsabilidad de darlo todo y que no me puedan reprochar nada. El fútbol es un deporte de aciertos y errores pero siento la responsabilidad de devolverlo con esfuerzo y dedicación", ante el Barcelona tuvo una sensación "muy buena porque la gente estuvo enganchada con el equipo y es el equipo el que tiene que enganchar a la afición también. Hay que valorar que compites contra todo un Barça y puede ser un punto de inflexión para recuperar en casa esa fiabilidad. Confío en que vamos a darle la vuelta a la tabla" y el objetivo del equipo es "un camino muy largo. Hemos pasado un tramo en el que hemos jugado contra los mejores clasificados y se puede entender que te cueste más ganarles. Vamos sobre el horario previsto, no tenemos que relajarnos y hacernos fuertes en casa, que ahí es donde puede estar la salvación".