Hay que buscar tipos resolutivos en estadios como el del Getafe, en donde las oportunidades escasean, los espacios se achican y los equipos comprenden muy bien el significado de la incomodidad. Osasuna pescó en el campo del Getafe porque su delantero de referencia anda con todas las luces puestas y emite destellos de peligrosidad. Ante Budimir marcó el gol que le dio un punto al equipo de Vicente Moreno en un partido que estuvo muchos minutos bajo el guion del conjunto local, que jugó poco, tuvo el balón casi nada, apretó a ráfagas, pero que se aprovechó de un fallo para marcar y gozar, un rato. 

Osasuna, que va a seguir peleando por lograr en otra parte el primer triunfo lejos de El Sadar, supo recomponerse, sufrir en los mejores minutos del equipo de Bordalás y aparecer en el marcador para remediar el gol en contra para, incluso, enfilar el tramo final del partido con más arrojo y búsqueda de una nueva diana. Ahí demostró que este Osasuna de Vicente Moreno va cambiando y que el comportamiento timorato y apocado de otras oportunidades se está dejando a un lado para demostrar algo más de ambición. También estuvo el partido a punto de escurrirse por el sumidero en un lanzamiento que se marchó fuera por muy poco en el tiempo de descuento. Fue otra muestra de ese fútbol descontrolado y difícil que siempre aparece en Getafe.

En un encuentro desarreglado, flojo para Osasuna en el primer tiempo, mejor en el segundo y a base de tirones por parte del Getafe, el equipo rojillo se llevó un punto que sigue aumentando la cuenta en este gran inicio de temporada. La clasificación podrá ir variando según el acierto o no de los rivales más directos, pero al conjunto de Vicente Moreno nadie le va a quitar los quince puntos que luce en el casillero después de haberse jugado 27.

El partido en Getafe no le dio un susto a nadie ni llevó a los rojillos por el camino de la sorpresa. Al contrario, el encuentro se desarrolló con el bloqueo mayúsculo que suele ser norma en los encuentros en el Coliseum. Osasuna masticó el balón durante mucho tiempo en la primera parte, subió a su estadística una posesión muy gorda –el 69%–, pero no logró coser una sola jugada de peligro más allá de algunos centros y apariciones puntuales de Budimir –el delantero firmó dos disparos fuera, los únicos de su equipo en el primer acto–. Semejante presentación se debe entender como un ejercicio de riesgo porque en Getafe se puede caminar por el alambre y, lo peor, no reparar en ello. No estaba haciendo nada del otro mundo el equipo madrileño cuando en un saque de banda, jugada maldita si concluye en gol, se organizó la fiesta para los de casa. Osasuna no defendió bien a Álex Sola, no hubo atención en el saque desde el costado ni presión en la carrera del centrocampista, y su centro pilló a Boyomo un paso por detrás de Bertug, que se retorció para cabecear y marcar. Muy fácil todo, muy desagradable.

El gol le sentó mal a Osasuna, que había pasado de estar dominado a ser algo más protagonista, pero siempre dentro de una partitura ligera y un guion comodísimo, sin sufrir casi nada –el equipo de Vicente Moreno hizo la primera falta del partido en el minuto 25– y teniendo la pelota y un criterio en el juego mucho mayor. Argumentos que sirven para montar una linda historia alrededor del balón, pero que carecen de la emoción de las acciones de peligro y las opciones del gol.

Bordalás debió haber medido muy bien los tiempos del encuentro porque decidió que mejor era terminar el partido en el primer empujón de la segunda mitad, antes de que se enredaran las cosas y que el gol por sorpresa se quedara corto frente a un rival que podía aparecer en cualquier momento. En diez minutos al regreso de los vestuarios, el Getafe fabricó un ramillete de ocasiones con un disparo cruzado de Luis Milla, un remate de Álex Sola que salvó un gran Sergio Herrera, un gol en fuera de juego del propio Sola y un lanzamiento de falta de Alderete que se marchó fuera pero que viajó con muy malas intenciones. En diez minutos, el encuentro parecía dirigirse hacia el desastre. Vicente Moreno decidió cambios y el equipo adoptó un perfil muy ofensivo. Dos medios centros más llegadores que anclas –Moncayola se colocó en el eje por Torró junto a Pablo Ibáñez– y Raúl García de compañero de Budimir –Rubén García fue el relevado– pintaron una formación atrevida, lo que correspondía para la tesitura. Cuando se cumplía la hora de partido, se produjo el asalto al marcador. Bryan, que cada vez que coge el balón genera crujidos a sus rivales, le devolvió la pelota a Budimir tras una pugna ganadora del croata –luego revisada por el VAR– y el delantero le sacó un metro de distancia al defensa para cruzar de un zurdazo imparable, marca de la casa.

Osasuna llegó a los minutos finales a buen ritmo, con superioridad física evidente y con más ocupación del terreno rival, con juego y futbolistas. Ibáñez no acertó a resolver una buena jugada entre Bryan y Budimir, y Abel Bretones, sobrado y poderoso en todas las partes del campo, hizo un centro extraño que se transformó en disparo y obligó al meta del Getafe a esforzarse para enviar a córner. Peña remató de cabeza como un ariete ya sobre el tiempo reglamentario, ejemplo de la ambición de Osasuna. Carles Pérez casi estropea la fiesta en el minuto 95 cuando se sacó un disparo en el borde del área de un balón suelto y puso el corazón en un puño a los jugadores rojillos. Es lo que pasa en Getafe, que nada está claro hasta el final.

-- Ficha técnica:


1.- Getafe: Soria; Djené (Juan Iglesias, min. 46), Berrocal (Nabil, min. 83), Alderete, Diego Rico; Milla, Arambarri; Carles Pérez, Uche (Álvaro Rodríguez, min. 74), Álex Sola (Risco, min. 74); y Bertug (Borja Mayoral, min. 46).


1.- Osasuna: Herrera; Areso, Catena, Boyomo, Bretones; Ibáñez, Torró (Moncayola, min. 59), Aimar Oroz (Moi Gómez, min. 79); Rubén García (Raúl García, min. 59), Budimir y Bryan Zaragoza (Rubén Peña, min. 79).


Goles: 1-0, min. 21: Bertug; 1-1, min. 60: Budimir.


Árbitro: José María Sánchez Martínez (Comité Murciano). Mostró cartulina amarilla a Torró (min. 34), Boyomo (min. 53), Moncayola (min. 76) y Catena (min. 87) por parte de Osasuna, y a Djené (min. 42) y a Bertug (min. 43) por parte del Getafe.


Incidencias: partido correspondiente a la novena jornada de LaLiga EA Sports disputado en el Coliseum de Getafe ante 10.670 espectadores.