PAMPLONA. Esta nueva delimitación obedece a una petición del Ayuntamiento de Pamplona debido a la modificación del urbanismo, al descubrimiento de nuevos restos arqueológicos, y a la publicación de nuevas normativas, entre otros factores, informa el Gobierno de Navarra.
El decreto del año 1968 indica que el conjunto histórico-artístico del casco antiguo de Pamplona comprende cuatro áreas: la zona histórico-artística propiamente dicha, que incluye el casco de la ciudad antigua ampliado en los baluartes y con la Ciudadela; la "zona de respeto" o sector edificado emplazado en el casco antiguo y la Ciudadela (primer ensanche); las zonas de ordenación especial; y las zonas verdes.
Posteriormente, se aprobaron otras normas que protegían partes que ahora es preciso incluir en una normativa global. Entre otras, destacan la declaración de monumento histórico-artístico de la Ciudadela (1973), y la delimitación del entorno de protección de las murallas y de la Ciudadela (1998).
Además, en fechas posteriores han ido apareciendo restos de muralla en sectores sobre los que se han realizado obras de equipamientos públicos, como los aparcamientos de las avenidas de Roncesvalles y Carlos III, que han permitido determinar con cierta exactitud el trazado original de la muralla sur de Pamplona, sin que se haya previsto su protección de forma adecuada.
También en el año 2000, el Gobierno de Navarra aprobó un Decreto Foral por el que delimitaba como bien de interés cultural de la Ciudadela la zona que protege el baluarte de San Antón, que había sido descubierto en fechas recientes.