pamplona - “Salesianos merece este apoyo”. El consejero de Fomento del Gobierno foral Luis Zarraluqui reconoció ayer que la sociedad pública Nasuvinsa “no va a vender” por 50 millones la parcela de la calle Aralar pero tampoco el proyecto de traslado del centro de Formación Profesional a Sarriguren va a “costar” los 50 millones previstos hace tres años. De este modo, el titular de Vivienda anunciaba ayer ante el Parlamento que en 2015 será necesario recalcular el precio de la manzana urbana con capacidad para la construcción de 400 viviendas distribuidas en nueve edificios. “La financiación adicional, si hace falta, correría a cargo de Salesianos”, expuso. Si bien dejó claro que Nasuvinsa no va a pagar “ni un sólo euro” por encima de lo que recupere de la operación urbanística en la que actúa como mediador, no ve “descabellado” que el Gobierno pueda plantear diferentes ayudas públicas a través de otros departamentos. Así, puso como ejemplo que si faltaran cinco millones para cuadrar el balance entre ingresos y gastos, los otros dos millones podrían llegar a través de una subvención (Educación, etcétera) o quizás Salesianos aportaría dos millones. “Si hace falta dinero se podría pensar en otras subvenciones públicas para este proyecto”, reiteró.

Pese a todo, Zarraluqui fue optimista sobre el éxito de una operación pensada, dijo, para “evitar la quiebra de Nasuvinsa y minimizar los riesgos”. “El precio será el que pueda permitir el mercado salvo que se aplazara la operación por falto de rentabilidad, algo que no parece probable puesto que los contactos con profesionales y agentes interesados hablan de suficiente viabilidad”, abundó.

Remarcó además que la propuesta urbanística es “extraordinariamente inteligente”, “muy buena” y permite dar “transparencia” a la parcela, modular la altura de las viviendas, crear un espacio abierto en diagonal entre Baja Navarra y Media Luna, y ofrecer variedad de tipología de viviendas sin pecar de excesiva altura.

El consejero calcula que para enero de 2015 podría iniciarse la venta de parcelas, y que para esa fecha se afinará mejor el precio de mercado. Asimismo, habrá una zona de la parcela que podrá ser compatible con las obras del nuevo colegio.

Según las estimaciones del departamento, las obras de urbanización en el Valle de Egüés está previsto que se adjudiquen para el 30 de septiembre de tal modo que en noviembre se empiece a urbanizar el polígono de Sarriguren y en septiembre de 2015 las obras del nuevo colegio (año y medio).

Cabe recordar que el convenio firmado en 2011 entre el Gobierno, Salesianos y los ayuntamientos de Pamplona y Egüés daba poderes a la sociedad pública -especializada en la promoción de suelo y vivienda social- para pilotar el traslado asumiendo todos los riesgos y financiación de la operación. Así, paga la construcción del nuevo colegio que luego recupera de la venta de la parcela de Pamplona.

Tras aprobarse un PSIS que justifica su interés general un Plan Especial detallará los pormenores del proyecto residencial dibujará la división de la parcela en diferentes lotes (11) para su venta y, a su vez, serán objeto de una tasación individual. A partir de ahí se firmará un contrato en virtud del cual la propiedad del solar del Ensanche pasará a ser de Nasuvinsa, que se encargará de la subasta de las parcelas. Serán los propietarios quienes asuman a su vez el coste de la urbanización de su solar.

Zarraluqui ensalzó a su vez la contribución de Salesianos al desarrollo económico e industrial de Navarra y los convenios que mantiene el centro con más de 400 empresas. “Es un centro de formación de primera categoría”, abundó.

Tras la comparecencia, el consejero adelantó a los medios que el valor de la edificación del nuevo colegio vía subasta alcanzó los 19 millones mientras que las obras de urbanización que partían de cinco millones más IVA se han rebajado hasta los 3,8 millones. Así el consejero estima que el coste del traslado a Sarriguren del colegio podría rondar “como mucho” los 40 millones.

Por su parte, la portavoz de UPN en la comisión de Fomento Mariví Castillo, criticó a la oposición por “supeditar” los intereses políticos a los de la ciudadanía, “la formación profesional y la investigación”. También Eloy Villanueva del PP confío en la “palabra del consejero” en apoyo a este proyecto. Desde el grupo solicitante de la comparecencia, Txema Mauleón, de I-E, acusó a Zarraluqui de “ocultar” los datos económicos relativos al coste de la operación. Y lo que es más grave, dijo, no existe ninguna “garantía” de que el Gobierno vaya a “perder” dinero en esta operación, escenario que puede ocurrir, expuso, dada la situación del mercado y el fracaso de operaciones urbanísticas como la calle Leyre. Tampoco se sabe el sobrecoste financiero, abundó. “¿Y si Salesianos se niega a pagar más que el valor de la parcela?”, remarcó. Maite Esporrín, del PSN, destacó la aportación social de Salesianos y su necesidad de actualidad infraestructuras. Koldo Amezketa, de Bildu, criticó la “demagogia” que existe en este tema puesto que Salesianos es un “centro modélico” porque el Gobierno decide el “abandono absoluto de la FP pública”. Cree además que al no recoger el convenio la posibilidad de que la operación sea deficitaria, habrá otros “peajes en la sombra”. También Txentxo Jiménez, de Aralar- NaBai, habló de “regular” el equilibrio económico teniendo en cuenta, además, que ya se fuerza un desarrollo de 300 viviendas por hectárea, y sería muy “grave” que se produjera la “quiebra” de una sociedad pública para una actuación que no le corresponde.