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Mola ya no está en los caídos y hay vía libre para el resto de exhumaciones de franquistas

El Ayuntamiento desestima las alegaciones y mantiene la retirada de los enterramientos de la criptaLos restos del general golpista se sacaron el 24 de octubre por deseo de sus familiares

Mola ya no está en los caídos y hay vía libre para el resto de exhumaciones de franquistas

pamplona - Los huesos del general golpista Mola ya han sido sacados de la cripta del monumento a los Caídos y los restos de los otros siete franquistas ahí enterrados correrán la misma suerte el próxima miércoles, como estaba previsto. El alcalde Joseba Asiron compareció ayer en rueda de prensa para anunciar la decisión del Ayuntamiento de Pamplona de desestimar las alegaciones presentadas contra las exhumaciones de los cuerpos que permanecían en el edificio, lo que deja vía libre al cumplimiento del acuerdo de la mayoría municipal.

Salvo un recurso de última hora que lo evite -que no pasaría de testimonial tras el acuerdo alcanzado con el Arzobispado- el próximo 16 de noviembre serán exhumados los restos de los siete franquistas que permanecen en la cripta, después de que la semana pasada fueran retirados los del general Mola.

Según desveló ayer el alcalde, fue un acto privado por deseo expreso de los familiares del militar, que desde el primer momento mostraron su disposición a respetar el acuerdo del Ayuntamiento con respecto a las exhumaciones en el monumento a los Caídos.

Acompañado de la responsable de la asesoría jurídica municipal, María Victoria Borja, el alcalde dio cuenta de la desestimación de las alegaciones presentadas contra la clausura del cementerio de la cripta del monumento a los Caídos por parte de las familias Sanjurjo y Arregui Olalquiaga, así como las presentadas por el Arzobispado.

trece alegaciones Los servicios jurídicos municipales han desestimado igualmente de forma parcial las alegaciones de la familia Aznar-Zozaya (pedían la documentación del expediente), mientras que han estimado las presentadas por las familias de Munárriz Escondrillas y Martínez Chasco, ambas favorables a la exhumación de sus allegados (pidieron estar presentes en la clausura del cementerio y que se les entreguen los restos de sus familiares).

En total, se presentaron 13 alegaciones y 4 peticiones, de las que 11 alegaciones y 3 peticiones han sido rechazadas; 1 petición ha sido estimada parcialmente y dos alegaciones han sido estimadas en su totalidad. Además del Arzobispado (4 alegaciones), de las siete familias con personas enterradas en la cripta tres de ellas presentaron 11 alegaciones en contra de la decisión adoptada por el Ayuntamiento (Sanjurjo, Arregui y Aznar), dos a favor (Munárriz y Martínez Chasco) mientras las dos restantes (Mola y Sota Garayoa) no presentaron alegaciones.

Los servicios jurídicos municipales establecen que la propiedad del edificio es del Ayuntamiento -por donación del Arzobispado- y que como propietario es quien tiene la potestad de decidir la clausura de la cripta como lugar de enterramiento, sin que esta decisión merme la consideración de la cripta como lugar de culto.

La asesoría jurídica considera que se ha seguido el procedimiento estipulado para clausurar la cripta como lugar de enterramiento y que más allá de los requisitos legales exigibles, el Consistorio encargó un informe para conocer la existencia e identidad de los familiares de las personas exhumadas de cara a realizar las notificaciones directamente en los domicilios, facilitarles el trámite y que pudieran decidir sobre el destino de los restos.

Lo que se va a mantener de momento será la simbología franquista que aparece en la decoración de la cripta. Según precisó el alcalde, será más adelante, cuando se aborde el destino definitivo del edificio, el momento para ver qué sucede con esas pinturas y objetos decorativos diversos.

Para las operaciones de exhumación, el Ayuntamiento se ha comprometido a adoptar las medidas técnicas oportunas para que no se rompa ningún elemento arquitectónico u ornamental.