pamplona - La concejala delegada de Cultura Maider Beloki defendió los cambios introducidos por el Ayuntamiento en las escuelas infantiles para atender la demanda de plazas en un euskera y con respecto a la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN) señaló que la respeta pero no la comparte, ya que vulnera la autonomía local, e insistió en que la resolución no supondrá modificar el reparto actual, que ofrece un 40% de plazas en euskera y el 60% restante, en castellano e inglés.

La edil de EH Bildu recordó que la oferta en vascuence del Ayuntamiento en el ciclo de 0-3 años estuvo limitada durante tres décadas a un 10% pese a que la demanda era cuatro veces superior. Por eso considera que la decisión del TSJN de revocar los cambios ha supuesto una vulneración de los derechos lingüísticos a parte de los pamploneses.

En ese sentido lamentó que el tribunal haya considerado que el cambio tuvo que ser autorizado por el Gobierno de Navarra y que no se tuviera en cuenta este mismo criterio cuando UPN decidió incluir el inglés en el modelo lingüístico de las escuelas infantiles.

El asunto fue tratado ayer en el Pleno después de que se rechazaran dos declaraciones de UPN y PSN pidiendo la dimisión de la concejala de Cultura y del alcalde Joseba Asiron por su gestión en este asunto. La declaración de los regionalistas recibió el apoyo del PSN y el rechazo del cuatripartito, mientras que la propuesta de los socialistas tuvo el voto en contra de EH Bildu, Aranzadi, Geroa Bai e Izquierda-Ezkerra, y la abstención de UPN.

debate La socialista Maite Esporrín indicó que Asiron ha recibido un “nuevo varapalo judicial”, que a las familias afectadas se les ocasionó “un gran daño y perjuicio” y que la medida de cambio lingüístico en las escuelas infantiles fue “arbitraria, injusta e ilegal”.

El portavoz de UPN, Enrique Maya, señaló que el tribunal concluye que el Gobierno de Navarra tiene que fijar el modelo y sostuvo la “responsabilidad política enorme” del alcalde Asiron y de la edil de Cultura, Maider Beloki, asegurando que se “han inventado” la demanda en euskera de escuelas infantiles.

Itziar Gómez, de Geroa Bai, dijo no compartir la sentencia del magistrado, que supone “una agresión a la autonomía municipal” del Ayuntamiento de Pamplona, y que la demanda en euskera había sido “ninguneada” por anteriores gobiernos de UPN, pero pidió prudencia ante los pasos que se puedan dar.

Por parte de Aranzadi, Laura Berro indicó que la sentencia “recorta” la autonomía municipal y es “restrictiva” en los derechos de los vecinos y en la soberanía municipal “para garantizar” los mismos y que la decisión fue tomada por el cuatripartito, por lo que rechazó que las responsabilidades recaigan en Asiron y Beloki.

La representante de Izquierda-Ezkerra, Edurne Eguino, reconoció la “precipitación” en la toma de decisiones, pero mantiene que la decisión fue “justa, equilibrada y equitativa para equilibrar los derechos de quienes demandaban un modelo en euskera”.