Navarra Suma evidenció ayer las dificultades que mantiene para buscar consensos pese a la minoría que ostenta en el Ayuntamiento y lo complicado que le ve a resultar aprobar los Presupuestos de 2021 tras no haberlo conseguido en su primer año de la legislatura.
Lejos de intentar una estrategia de aproximación al PSN -EH Bildu y Geroa Bai ya han anunciado que no cuenten con ellos- que permita sacar adelante el proyecto presupuestario del próximo ejercicio, Navarra Suma volvió a dejar claro que no tiene intención de consensuar ni ampliar los acuerdos con los grupos de la oposición, lo que en la práctica supone romper los escasos puentes que quedaban en pie.
“Solo nos llaman para los marrones, para nada más, y así no puede ser. No tienen voluntad de buscar acuerdos y siguen sin darse cuenta de que no tienen mayoría”. Con esta contundencia se manifestó ayer la portavoz socialista Maite Esporrín durante la Comisión de Presidencia, donde el PSN presentó una iniciativa para poner en marcha varios proyectos a cargo de los fondos europeos después de que Navarra Suma presentara hace unos días su propia propuesta sin contar con el resto de los grupos.
La iniciativa del grupo socialista fue apoyada por EH Bildu y Geroa Bai, mientras que Navarra Suma se abstuvo. En ella se insta a “debatir y consensuar los proyectos en la propuesta que el Ayuntamiento presentará al Gobierno de Navarra para relanzar proyectos con el dinero procedente de los fondos europeos del plan Next Generation”.
Entre los proyectos que podrían ser financiados con fondos aprobados por la Unión Europea para paliar la pandemia, la oposición propuso poner en marcha barrios solares, nuevas electrolineras, el corredor sostenible del Labrit, terminar el carril bici de Pío XII, la eliminación de barreras en el Paseo de Sarasate, el Plan de Ciclabilidad, la creación de una red de bicicletas de alquiler o la rehabilitación del edificio de los Caídos.
Esporrín lamentó que Navarra Suma no se reuniera con el PSN para consensuar los proyectos de Pamplona y consideró que con esta actitud no tendrá el apoyo de su grupo para posteriores acuerdos. “Donde gobiernan no buscan acuerdos y donde están en la oposición siempre van a la contra. Qué gran decepción está siendo Navarra Suma”.
La concejala delegada Ana Elizalde cuestionó los proyectos presentados por el grupo socialista al considerar que no encajaban dentro de los parámetros planteados por la Unión Europea y evitó abrirse a negociar el Plan de Recuperación y Resiliencia, que recogía 29 proyectos por valor de 135,1 millones de euros.
Joxe Abaurrea (EH Bildu) también se refirió a la necesidad de ampliar los consensos ante una situación como la actual y recordó que los proyectos presentados por Navarra Suma fueron iniciados en la pasada legislatura. “Abran el debate para que podamos aportar nuestras sugerencias. Será bueno para la ciudad”.
Por parte de Geroa Bai, Patxi Leuza se quejó de la actitud de Navarra Suma y de las consecuencias: “No querían las aportaciones y nos trajeron una propuesta cerrada, sin margen para plantear nuevas iniciativas. No es algo nuevo, llevan funcionado así desde el principio de la legislatura”.
“Navarra Suma solo nos llama para los marrones, para nada más”
Portavoz del PSN
