El vecindario de la Rochapea ha aprovechado la única presencia del alcalde Maya en el foro de barrio para mostrar su enfado por algunas de las decisiones adoptadas por el Ayuntamiento de Pamplona en lo que va de legislatura y por lo que consideran un abandono del sector productivo y social del barrio.
La reunión se ha celebrado en el salón de actos del Civivox Jus la Rocha, han asistido algo más de medio centenar de personas y ha estado presidida por el alcalde Maya, acompañado de la concejala de barrio Carmen Alba y de un técnico municipal, Javier Zardoya.
A diferencia del modelo seguido en la pasada legislatura, cuando se organizaron varias reuniones en cada barrio para poder dar respuesta a las inquietudes vecinales, Navarra Suma ha optado por un modelo centrado en la presencia del alcalde Maya, lo que convierte los foros vecinales en una reunión donde el alcalde y el concejal de barrio de turno se limitan a enumerar los proyectos en el barrio y los vecinos, sus diversas quejas.
Maya ha hecho una breve presentación y se ha referido al proyecto oPEN Lab, financiado por la Unión Europea, que pretende identificar paquetes de soluciones replicables y comercialmente viables en relación a la obtención y reparto de energía limpias.
Las explicaciones sobre dicho proyecto han corrido a cargo del técnico, que ha dado detalles del proyecto que afecta a las instalaciones de la antigua Matesa y ha anunciado la creación de una oficina energética en el barrio.
El alcalde ha vuelto a tomar la palabra para confirmar que el edificio de Matesa será reformado y las naves pegadas a la avenida Marcelo Celayeta serán derribadas, previsiblemente a principios del año que viene.
También ha asegurado que ahí se edificará una residencia para las personas mayores.
También ha aludido a las nuevas viviendas en la calle Artica, a la rehabilitación en San Pedro y al grupo Oscoz.
Sobre las inundaciones, el alcalde ha señalado que hay 500.000 euros para ayudas destinadas a intervenciones contra las riadas y que se van a actualizar los estudios y modelos hidrográficos junto a la Confederación Hidrográfica del Ebro CHE). Ha mencionado el carril bici de Bernardino Tirapu, la implantación de la zona azul, los aparcamientos disuasorios y el futuro de las dos parcelas no construidas en el paseo Anelier.
La concejala de barrio ha comentado algunas de las preguntas tramitadas previamente a los organizadores del foro de barrio, como el proyecto del carril bici previsto en Marcelo Celayeta, que según ha dicho Carmen Alba está en fase de estudio.
Terminada esta primera parte, que ha durado más de media hora, se ha abierto el turno de intervenciones para los asistentes a la reunión.
Los comerciantes abren el turno de intervenciones
El presidente de la asociación de comerciantes La Rotxa, Fermín Damborena, ha sido el primero. Ha recordado al alcalde que desde 2020 esperaban su presencia en el foro vecinal y ha sido muy crítico con la gestión de Navarra Suma tras las inundaciones de diciembre del año pasado.
Ha asegurado que el Ayuntamiento no informó de las ayudas que se activaron ni empatizó con el barrio tras las riadas, con una ausencia de los responsables municipales en las calles del barrio.
"No atendieron al barrio en las inundaciones de diciembre"
Damborena ha lamentado la denegación de permisos para varias actividades programadas en el barrio con el objetivo de impulsar la vida comercial y social y la proliferación de los grandes centros comerciales, a los que ha definido como los “grandes depredadores” del comercio de los barrios.
El portavoz de la asociación La Rotxa se ha referido también a los problemas que se han generado en el barrio desde la implantación del estacionamiento regulado en 2019 y ha preguntado al alcalde si las trabas al comercio local sirven para impulsar la actividad económica.
A continuación ha tomado la palabra una comerciante de la plaza Roja, que ha pedido que se ponga tal denominación a la plaza para facilitar su localización.
Maya y la presa de Santa Engracia
Dani, de Arga Bizirik, se ha referido al proyecto de reforma de la presa de Santa Engracia y a la resolución de la CHE que ordenó su demolición. Ha preguntando por el estado actual del expediente, a lo que el alcalde ha comentado que el Ayuntamiento está trabajando para mantener la presa, no para tirarla, y que se ha presentado un proyecto a la CHE.
Javier Miguel Elizondo, en representación de una comunidad de vecinos afectada por las inundaciones, se ha referido a la necesidad de intervenciones en las redes de saneamiento y colectores del barrio para reducir daños.
Otra vecina ha lamentado que Policía Municipal no avisó de las inundaciones en todo el barrio y ha criticado la gestión de la oficina que se abrió para gestionar las ayudas.
Mari José ha reclamado la construcción de una pasarela que comunique con Buztintxuri, una obra que el Ayuntamiento ha descartado por el alto coste (entre 500.000 y 600.000 euros).
Eva, de la asociación Mejorana, ha preguntado por la labor municipal en favor de la salud mental y ha pedido medios ante la alta demandaque existe en el barrio.
Los integrantes de la comparsa de gigantes y cabezudos del barrio han explicado el problema que les va a suponer tener que abandonar el local que ahora ocupan en la nave de la antigua Matesa. El alcalde se ha comprometido a estudiar la cuestión.
También ha intervenido un vecino que ha aludido las piscinas de la Rochapea, solicitando el apoyo municipal ante la delicada situación que vive la entidad, destacando la labor social y deportiva que desarrolla en el barrio. El alcalde ha dicho que el Ayuntamiento no puede intervenir en este momento ya que el asunto atañe a la sociedad y a una entidad bancaria (La Caixa).
Imanol, como portavoz de los colectivos populares, ha preguntado por los criterios para prohibir actos en las calles del barrio.
La última intervención ha sido de una vecina de San Pedro para denunciar la inseguridad ciudadana en la zona.
