Segunda caída grave en la Cuesta de Santo Domingo con una bicicleta eléctrica del Ayuntamiento de Pamplona. Al igual que José Antonio Imirizaldu, que pasó 13 días ingresado, Javier G.C. denuncia que la rueda delantera se quedó bloqueada, se cayó al suelo de rodillas y fue trasladado al Hospital Universitario de Navarra (HUN).

Ride On, la empresa que gestiona el servicio de bicicletas eléctricas, exige a Javier 202 euros que deberá pagar de su bolsillo porque el seguro no le cubre el incidente: 113 euros por los desperfectos que sufrió la bicicleta y otros 89 por el tiempo que pasó desanclada.

Los hechos sucedieron el jueves 2 de noviembre. A las nueve de la noche, Javier salió a las nueve de la noche de la Escuela Oficial de Idiomas, cogió una bicicleta eléctrica en la plaza Compañía y puso rumbo a la Cuesta de Santo Domingo.

“Llegué a los corrales, di la curva y descendí hacia el puente de Curtidores. En mitad de la recta frené, la rueda se quedó bloqueada y salí impulsado hacia el manillar. Me lo clavé en el pecho”, relata.

Javier cayó al suelo de rodillas, se golpeó las piernas con el asfalto y se raspó la espalda. “La cabeza se libró. Tuve suerte”, comenta aliviado.

Una médico presente en Santo Domingo atendió a Javier antes de que llegara la ambulancia. “Miró las heridas, me dijo cómo debía permanecer en el suelo y consiguió que mantuviera la calma”, agradece.

A los pocos minutos, los enfermeros se personaron en la zona y le trasladaron al HUN. “Me subieron a la ambulancia en camilla porque no me podía poner de pie. Las piernas me fallaban y me quedé mosqueado”, reconoce Javier.

En el HUN, le bajaron tres veces a rayos, donde le hicieron radiografías “como podían porque tenía mucho dolor. Me dieron morfina”, explica. Además le hicieron una placa en la espalda.

Las pruebas descartaron cualquier rotura y a las tres de la mañana, cuando la medicación hizo efecto y Javier consiguió ponerse de pie, los sanitarios le dieron el alta.

En la actualidad, Javier no se ha reincorporado a su puesto de trabajo, la pierna le “falla” en algún movimiento y le quedan hematomas por el cuerpo.

A pagar 202 euros

A la mañana siguiente, el viernes 3 de noviembre, Ride On, comunicó a Javier que la Policía Municipal les había entregado la bicicleta y preguntaron qué había sucedido. “Les dije que había sufrido un accidente porque la bicis casi no frenan y en ese momento me frenó de golpe”, comenta.

Al colgar, Javier recibió una notificación de la app de Ride On con el siguiente mensaje: “Su viaje ha sido cerrado por un agente”.

A continuación, la empresa le envió un correo electrónico con una factura adjunta cuyo importe ascendía a 89 euros.

No sé cómo pretendían que anclara la bicicleta si había sufrido un accidente, no me podía poner de pie y me habían trasladado al hospital. Sus agentes podían haber devuelto la bicicleta antes”, critica Javier, que aún no ha saldado la deuda porque tiene la cuenta de Ride On bloqueada.

Este martes, 7 de noviembre, Javier recibió un “presupuesto de reparación” de la bicicleta que ascendía a 113 euros: 9,23 euros por el “basket”, 8,79 euros por el “display”, 35 euros por el “trabajo técnico” y otros 60 por el “trabajo de coordinación”.

Estaba bastante asustado porque a José Antonio –el anterior accidentado– le reclamaron 2.500 euros. Por suerte, he dañado menos la bicicleta”, indica. Sin embargo, el seguro de Javier no cubre el incidente y deberá abonar la reparación. 

Bicis con seguro

Javier, como otros tantos usuarios, opina que las bicicletas eléctricas deberían estar aseguradas en casos en los que el conductor no cometa ninguna negligencia.

“Una persona que circula ebria o de forma temeraria debe pagar los desperfectos de la bici, pero mi accidente se produjo porque la rueda se quedó bloqueada. El servicio debe contar con algún tipo de seguro”, subraya Javier.

A raíz del incidente de José Antonio, que pasó 13 días ingresado en el hospital, el Ayuntamiento de Pamplona se ha comprometido a realizar un estudio para saber cuánto dinero costaría que el servicio de alquiler de bicicletas eléctricas dispusiera de un seguro de responsabilidad civil para daños a terceros y usuarios del servicio.