La Comisión de Asuntos Ciudadanos del Ayuntamiento de Pamplona ha aprobado una declaración en la que rechaza los insultos machistas vertidos este lunes contra la portavoz socialista en el consistorio, Marina Curiel, y contra la también socialista presidenta del Gobierno foral, María Chivite.

En el primer caso las descalificaciones se produjeron en la red social "X" tras la firma del acuerdo entre el equipo de Gobierno municipal y PSN para los próximos presupuestos de Pamplona, mientras que María Chivite fue insultada por un grupo de agricultores que aprovechó un acto institucional que la presidenta celebró en Olite.

El texto ha sido propuesto por PSN y ha contado con los votos en contra de UPN, la abstención del PP y los apoyos de EH Bildu, PSN, Geroa Bai y Contigo-Zurekin.

Así, se acuerda manifestar el "rechazo más absoluto a los insultos, descalificaciones y manifestaciones machistas sucedidas el lunes, tanto en el ámbito local de Pamplona como en el foral de Navarra".

También se expresa la solidaridad hacia las dos mujeres, representantes de las instituciones, que en el día de ayer sufrieron "dichas faltas de respeto por parte de ciertos partidos y asociaciones".

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Una 'tractorada' en Olite para protestar ante Chivite Unai Beroiz

Asimismo, se insta al Ayuntamiento de Pamplona a "tomar medidas concretas para que todas podamos ejercer nuestra actividad política sin discriminación por nuestra condición de ser mujeres, y combatir cualquier forma de discriminación y violencia contra las mujeres en el ámbito político".

En defensa del texto, la propia Curiel ha advertido sobre la "profunda brecha en la lucha por la igualdad de género y el respeto hacia las mujeres en la esfera pública" y ha considerado "desalentador" constatar que las mujeres políticas sean objeto de ataques basados en su sexo".

Lo constató ella misma con "comentarios despectivos hacia su persona a través de las redes sociales o con los insultos hacia la presidenta del Gobierno de Navarra en un acto institucional". Son actitudes que "reflejan una cultura machista arraigada que se niega a ceder terreno ante el avance de la igualdad".

Por tanto, considera que es responsabilidad de los partidos políticos y las instituciones gubernamentales implementar políticas públicas efectivas que garanticen "la igualdad, la visibilidad y el empoderamiento de las mujeres en la vida política".

Esto incluye "la adopción de medidas contra el acoso y la discriminación, la promoción de la participación equitativa de mujeres en cargos de liderazgo y la sensibilización sobre la importancia del respeto a la diversidad y la igualdad entre mujeres y hombres", zanja.