El chocolate marida con todo… también con libros. Es el planteamiento de la Casa de la Juventud que este miércoles 5 de febrero inicia una nueva actividad con un perfil peculiar: fiestas de lectura Chocolate con libros. Serán quedadas de lecturas compartidas de carácter informal, pero no tanto para leer el mismo libro, sino para compartir intereses y hacerse recomendaciones. De jóvenes para jóvenes, de lectores con larga trayectoria a noveles y el final de la sesión será siempre una taza de cacao. Chocolate caliente procedente de comercio justo.
Y es que la lectura no tiene por qué ser un hábito solitario. Posiblemente lo sea el acto de leer, pero no el universo lector, que se puede compartir y enriquecer. La idea es que las personas jóvenes que decidan participar acudan a las sesiones lo hagan con el libro que se estén leyendo. Tras un rato de lectura personal, se dará paso a las sesiones de intercambio. Una forma de conocer libros, autoras, autores y personas amantes de la lectura.
La cita tendrá lugar los primeros y terceros miércoles de cada mes, a las 18:30 horas. La actividad es de entrada libre, no requiere inscripción previa y está destinada a personas de entre 14 y 30 años. Esta iniciativa está inspirada, en pequeño formato, en las Fiestas de lectura que se celebran en ciudades Nueva York, los Reading Rhythms que reúnen a miles de personas y que ahora están llegando a Europa. Leer juntos, pero de forma individual y en silencio quiere ser, de alguna manera, una “sentada reivindicativa”.
Chocolate con libros se enmarca en el programa Cafeteando, un conjunto de actividades de ocio y asesoría que engloba, desde sesiones de encuentro, hasta juegos de mesa, karaokes o talleres. Esta actividad se suma a otras de carácter cultural que se desarrollan en este espacio municipal que es usualmente utilizado por grupos de teatro, grupos de música y otros grupos culturales, y que es lugar habitual de presentaciones literarias o recitales poéticos.
Una larga trayectoria literaria
La literatura es parte de la historia de la Casa. Durante dos décadas, desde 1994, este servicio editó la revista Una vez en Pamplona/Iruñean behin, una publicación semestral que recogía los trabajos literarios de quienes participaban en el Aula de Literatura. Este último servicio se creó en 1992 como espacio de encuentro y funcionó durante años. De hecho, ya antes de que apareciera el primer número de Una vez en Pamplona/Iruñean behin, en 1992 la Casa editó una primera recopilación de los autores del Aula de Literatura bajo el título Homenaje- Recuerdo a Miguel Hernández. Además, en su momento existió también un club de lectura específico.
En estos años el Consistorio también ha promocionado la presencia en Pamplona de autores noveles a través del programa Letrajoven. Este programa, a su vez, ha propuesto concursos vinculados a la literatura, como el diseño de marcapáginas o premios económicos para las recomendaciones de lectura. Y con mucha frecuencia, son libros los premios de concursos y certámenes de la Casa.
La preocupación por la lectura y la escritura es una línea de trabajo que se sostiene en el tiempo. Aún hoy, de forma habitual la Casa acoge actividades de este ámbito como talleres de creación, recitales o asistencia a eventos literarios. El Ayuntamiento organiza, además, desde 1990, el certamen literario para jóvenes que premia cada año decenas de trabajos de narración breve y poesía en castellano y euskera.