La Asociación de Familiares de Fusilados de Navarra en 1936 (AFFNA-36) anunció este miércoles en rueda de prensa la colocación de un monumento en homenaje a las víctimas de la represión franquista en la Rochapea. La inauguración del conjunto escultórico tendrá lugar este sábado, a partir de las 12.00 horas en la calle Río Arga. “Los mataron, pero no pensaron que los muertos tenían vivos, y los vivos, memoria”. La frase, que citan habitualmente en AFFNA-36, “refleja el porqué de nuestra asociación. Difundir y transmitir su memoria, la de las víctimas que produjo el golpe de estado del 18 de julio de 1936. Los objetivos, el trabajo y el compromiso de AFFNA-36, son ser la voz, dar testimonio, y que los derechos de las víctimas sean reconocidos. Frente al olvido; la memoria y el reconocimiento. Es el camino que transitamos, es nuestro afán”, explicaron ayer.

Celebramos este acto de homenaje en estos tiempos convulsos, es nuestra aportación a la aspiración, a la pretensión de que la sociedad no se infecte con los gérmenes del blanqueo, del negacionismo de aquellos hechos, que no se contamine con el odio que actualmente nos invade (es fascismo) y aprenda de los errores del pasado; con el deseo, de que nunca más, y para nadie, aquellos horrores”, añadieron.

El germen del monumento

El trabajo Golpe Militar de 1936 en el barrio de la Rotxapea realizado hace años por la asociación fue “el germen que nos motivó y dio razones hasta llegar a la inauguración de este monumento. Este trabajo coincidió con el desarrollo del proyecto Tropezones, iniciado por nuestra asociación hace diez años. Poco a poco, por las calles del casco viejo de Pamplona fuimos instalando estas placas conmemorativas, más tarde seguimos por el primer Ensanche y a la par, al mismo tiempo en varios pueblos de Navarra. Cuando nos interesamos por hacerlo en la Rotxapea, ya que el número de víctimas era numeroso y significativo dado el carácter de núcleo obrero surgido a la par de las estaciones de tren, la del Norte y la del Plazaola; nos encontramos con la dificultad que los cambios en el urbanismo y la disposición actual de calles y plazas, no tiene nada que ver con la Rotxapea de 1936. La idea del Proyecto Tropezones contempla que las placas se instalen en la acera, junto a la puerta de la vivienda de la que la víctima a la que recordamos y homenajeamos, salió con vida para no regresar jamás”, explicaron en rueda de prensa.

Por este motivo, la asociación memorialista valoró la idea de instalarlos todos en un punto concreto. “Dado el carácter de trabajadores ferroviarios de muchas de estas víctimas, en principio pensamos en hacerlo en la Estación del Norte. En varias estaciones del país, ya se han colocado memoriales en este sentido”. Apostaron instalar el monumento en el paseo del río Arga, “que vertebra el barrio. Un monumento dividido en dos partes: una superficie adoquinada y un pedestal. Sobre el pedestal se sitúan dos elementos: la representación de unas vías de tren y una silueta de mujer frente a un fondo de chapa”. Asimismo, los adoquines, los cuales simulan una acera, servirán de base para la colocación de los tropezones. Estas placas se incrustarán en los adoquines haciendo un total de 47.