pamplona. Ayer lo desveló el líder del PP y próximo presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en una comparecencia en la que también anunció quien desempeñará la portavocía de su partido en ambas cámaras: los elegidos son el ex alcalde de Gazteiz, Alfonso Alonso, para el Congreso de los Diputados, y el gallego José Manuel Barreiro, en el Senado.
Rajoy realizó este anuncio durante su intervención ante los miembros de la Junta Directiva Nacional del Partido Popular, reunida ayer en Madrid. Además de desvelar la incógnita de los puestos institucionales que abrirán a partir de hoy las Cortes Generales de la X Legislatura, el anuncio deja claro que el futuro de los hasta ahora pesos pesados del grupo popular en el Congreso (la portavoz Soraya Sáenz de Santamaría, o el responsable de Comunicación, Esteban González Pons), parece estar en el futuro gabinete. Hay una tercera lectura y es el considerar que el tercer y cuarto puestos en cuanto a representatividad institucional del Estado (tras el rey y el presidente del Gobierno) recaigan en aznaristas confesos: Posada fue sucesor de Aznar en Castilla y ministro suyo, mientras García Escudero es amigo personal del expresidente desde la niñez. Quizá Rajoy da así la cuota de poder que espera este sector para reservarse un Gobierno de afines y tecnócratas libres del peso del pasado.
apoyo Quizá esto podría explicar lo que los analistas califican como "extrañeza", que no es otra que el nombramiento de Posada. Y es que en los círculos políticos la mayoría de las quinielas apuntaban al catalán Jorge Fernández Díaz para ocupar la Presidencia del Congreso, movimiento que se habría interpretado como un guiño a Cataluña, feudo en el que el PP aspira a crecer. Sin embargo Posada, que no sonaba en las quinielas pese a su veteranía y a su amistad con Rajoy, ha sido el elegido: "Tiene suficientes conocimientos y arraigo para ser un magnífico presidente", concluyó Rajoy.
De todas maneras la elección contenta también a los socialistas, que ven en Posada una persona dialogante y con la que se puede negociar. Así lo destacó quien hoy le dará el testigo, José Bono, que alabó su "templanza".
En sus primeras declaraciones tras la designación Posada se mostró muy agradecido y aseguró que, desde ya, siente la "responsabilidad del cargo". Eso sí, no avanzó qué tipo de Presidencia será la suya y apuntó que eso "lo dará el futuro" y además "lo tendrán que juzgar los demás". "Yo pretendo ser un presidente que atienda a todos y que haga que se cumpla el reglamento", insistió, antes de asegurar que es consciente de que es "un puesto muy importante" y por ello siente ya "el peso de la responsabilidad".
Pío García Escudero por su parte destacó la gran responsabilidad que tiene el Partido Popular tras el apoyo que ha recibido en las últimas elecciones. Aunque no incidió en el tema, el nuevo presidente del Senado recibió ayer el respaldo de su antecesor, el socialista Javier Rojo, quien le pidió que defienda a la Cámara Alta como la representación de la España de las Autonomías.