Pamplona. El presidente del Ejecutivo, Mariano Rajoy, afirmó ayer que aprobar resoluciones "que no están en el espíritu constitucional", en alusión a la declaración de soberanía del Parlamento catalán, "no sirve para nada", e insistió en que el Gobierno "aplicará siempre la ley". Así lo puso de manifiesto el jefe del Ejecutivo en una comparecencia conjunta con el presidente de Perú, Ollanta Humala, con motivo de la visita oficial que está realizando a este país. Al final de su intervención, Rajoy aprovechó para referirse, sin citarla, a la declaración de soberanía catalana y mantuvo que "los españoles no debemos distraernos del objetivo esencial y pretender poner en tela de juicio todo".
En este sentido agregó que el Gobierno seguirá apostando por la convivencia y el diálogo, pero "aplicará, como es su obligación, puesto que para eso nos han elegido los españoles, la ley siempre y si ello fuera preciso con mayor razón".
La pregunta es cómo aplicará el Ejecutivo la Ley. El encargado de dar la respuesta fue el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, afirmando de forma breve y escueta lo que ya había dicho Rajoy: "El Gobierno va a cumplir y va a hacer cumplir la ley".
presión autonómica Aparte de esta amenaza velada, el otro medio de presión que ha puesto en marcha el PP para enfrentar la demanda soberanista catalana es el posicionamiento en contra de las comunidades autónomas que controla. "Grave error", "disparate descomunal", "absoluta tomadura de pelo", "proyecto inadmisible", "revancha personal de Artur Mas", "camino sin salida" y "ataque a España" fueron algunas de las expresiones utilizadas por los jefes de Gobiernos autonómicos populares a los que se sumaron también los socialistas. Sólo los Ejecutivos vasco y canario se limitaron a expresar una posición de "respeto institucional" a lo que se apruebe en otros territorios en el ámbito de sus parlamentos. El Ejecutivo canario en boca de su portavoz, Martín Marrero, que ofreció ayer una rueda de prensa. Para el Gobierno de Navarra, por contra, la declaración soberanista es "inadmisible", según su vicepresidente y portavoz, Juan Luis Sánchez de Muniáin, que animó al Estado a intervenir si se convoca la consulta.
Agenda Hasta que llegue ese momento, la siguiente pregunta es cuál es la hoja de ruta que se marca la Generalitat. En primer lugar, la creación del Consejo Catalán de la Transición Nacional que se pondrá en marcha de forma paralela a la apertura de contactos formales con las instituciones del Estado.
Incluido en el acuerdo de legislatura de CiU y ERC, el Consejo Catalán de la Transición Nacional será el organismo asesor en todo lo relativo al proceso para ejercer el derecho a decidir y para dotar a Cataluña de "estructuras de Estado". Este consejo de "expertos" empezará a formarse en las próximas semanas.