pamplona - Hay cosas que el tiempo no hace cambiar. Tampoco en política. Con motivo de los 25 años de Onda Cero en Navarra, la radio convocó al presidente de Navarra entre 1991-1995, Juan Cruz Alli, y a Uxue Barkos, actual mandataria, para que pusieran nombres y apellidos al pasado y el presente de las dos notas más discordantes de una política foral dominada por la derecha, que tanto antes como ahora ha reaccionado de la misma manera: elevando el tono en la oposición y dando la espalda al cambio.

Así lo constataron ante los micrófonos de la radio, instalados ayer en el centro comercial Itaroa con motivo de la efeméride. Juan Cruz Alli recordó que su llegada al Gobierno en 1991 provocó “un enfrentamiento radical” con el PSN, que había sido desalojado del Palacio de Navarra tras dos mandatos. “La actitud del PSN fue durísima en un primer momento”, aunque en su caso poco a poco se fue “dulcificando”. Una actitud prácticamente calcada con la actual, en la que UPN ha reaccionado tensando la cuerda de la crispación y elevando el tono identitario para atacar al actual gobierno del cambio liderado por Uxue Barkos. Una situación que, a diferencia de hace 25 años, no parece que se vaya a dulcificar. Barkos, que en parte se sintió heredera del primigenio Gobierno del cambio de 1995, asumió que los cambios “pueden generar temor”, aunque los navarros “tampoco rechazan lo que les pueda suponer de positivo”. Algo que se complica ya que, a juicio de Alli, Navarra tiene “una gran base conservadora”, y también registra “actitudes conservadoras incluso en gentes que se califican de progresistas”, por lo que “la gente asume los cambios más bien a rastras”. - D.N.