La única voz navarra en el Debate sobre el estado de la Nación ha sido la de los diputados Sergio Sayas y Carlos García Adanero. Ambos intervinieron ayer, como diputados no adscritos tras su expulsión de UPN, y lo hicieron con duras críticas a Pedro Sánchez, en especial por sus acuerdos con EH Bildu. Pactos “miserables” y “nauseabundos”, según Sergio Sayas, que acusó al presidente de “vender la Arcadia feliz” porque solo busca “resistir” en Moncloa. A su juicio, las medidas económicas anunciadas son “otro ejemplo de propaganda y humo” en un momento en que los españoles “ya no aguantan más frivolidades”. “En cuatro años, ha conseguido que seamos la peor economía de la UE, nos ha convertido en rehenes de golpistas y batasunos, ha hecho de la mentira su forma habitual de hacer política, y ha pervertido las instituciones y la democracia asaltando el CGPJ, el Parlamento, el CNI o la Fiscalía”, afirmó Sayas.

Sánchez no quiso entrar al cuerpo a cuerpo con el diputado navarro, y se limitó a recordar la “traición” que supuso su actuación en la votación de la reforma laboral del Gobierno y que, a la postre, derivó en su expulsión de UPN. “Simplemente decirle que hay pocas cosas más mezquinas en política que traicionar a tus siglas, a tus ideas y a tus compañeros”, respondió Sánchez.

Tras Sayas subió a la tribuna el otro diputado navarro, Carlos Adanero, que recogió el guante de Sánchez y le replicó: “Es peor traicionar a los votantes. Entiendo que eso usted no lo puede entender”. Adanero recordó así las promesas del líder del PSOE que en campaña aseguró que no pactaría con Bildu y que no indultaría “a los golpistas”. Adanero acusió además a Sánchez de estar “arruinando” a las clases medidas españolas y consideró que está consiguiendo que irse al pueblo de vacaciones sea “un viaje de lujo”. A su entender, la medida de Sánchez de fijar un impuesto a los bancos “va a repercutir” en los ciudadanos y no soluciona nada”. Además, recriminó a Sánchez que dijese que ETA “no existe” y le preguntó que por qué entonces “cambió presos por presupuestos”, por qué “permite homenajes a etarras” o siguen “aguantando incidentes en la procesión de San Fermín”. “Claro que existe”, insistó.

Sánchez tampoco quiso confrontar con Adanero y, al igual que con Sayas, fue escueto pero directo en sus palabras. “Con usted se eleva el tono pero baja mucho la calidad del debate”, replicó el presidente para dar por zanjada la discusión.