La prórroga de los Presupuestos del Estado (PGE) deja en el aire algunas de las inversiones que el Gobierno central tenía previsto acometer durante este año en Navarra. Fundamentalmente obras públicas de competencia estatal o financiadas con ayuda del Ministerio, que podrían sufrir nuevos retrasos en la Comunidad Foral. Pero también en las autovías de territorios limítrofes como Soria o Huesca, que han quedado sin presupuesto para avanzar en las obras de algunos tramos.

El adelanto de las elecciones en Cataluña ha llevado al Gobierno de Sánchez a prorrogar los presupuestos de 2023 y esperar a que se aclare el panorama político para, ya con más tranquilidad, tratar de buscar una mayoría que garantice la aprobación de las cuentas públicas. Eso será ya en septiembre, con la previsión de aprobar la ley a finales de año para su entrada en vigor en 2025.

Hasta en entonces, tanto los ministerios como las empresas públicas deberán repetir las cuentas del año pasado y eso pone en duda algunas inversiones en Navarra. El Ejecutivo foral, que está ya en contacto con el Gobierno central para analizar el escenario, confía en que su impacto sea mínimo pero asume que ahora mismo hay mucha incertidumbre. Está prevista la visita del secretario de Estado de Transportes que podría aclarar algunos aspectos.

Las obras principales

Sobre el papel, el Gobierno de Navarra confía en que las obras del TAV no se verán afectadas. La inversión prevista para este año era 116 millones, la mayor hasta la fecha, sobre todo para tramo Tafalla-Campanas, cuyas obras se adjudicaron en noviembre pasado con un presupuesto de 238 millones. Corren a cargo de Adif y la empresa pública tiene margen para adaptar sus proyectos a la prórroga. La ejecución real siempre queda además por debajo de lo presupuestado.

En similar situación quedaría la construcción del Canal de Navarra, en manos de la empresa pública Canasa. La presidenta María Chivite ha asegurado que las obras comenzarían este año, pero el proyecto está todavía sin licitar y falta por concretar la fórmula de financiación entre Navarra y el Estado. En los presupuestos de 2023 había una previsión estimada para 2024 de 15 millones, pero sin consignación.

A partir de ahí son todo incertidumbres. También en lo que se refiere a la gestión de los fondos europeos, que directa o indirectamente gestiona el Gobierno central y de los que dependen buena parte de los proyectos que ahora tiene en macha Navarra. El Ministerio de Economía asegura que los presupuestos prorrogados contienen “suficiente espacio para llevar a cabo los desembolsos previstos y para la ejecución de la demanda”, pero su destino está todavía por definir y pendiente de la autorización de la UE.

Túneles de Belate

Lo mismo ocurre con las partidas recogidas en el presupuesto del pasado año y que se ha replicado ahora. En el caso de la N-121 se mantienen los 15 millones para las obras del 2+1, pero será el Ministerio de Transportes quien decida si se ejecuta la subvención. 

Más complicada es la situación de los túneles de Belate, cuyas obras todavía no han comenzado, y que tenían previsto recibir una subvención de 40 millones por parte del Estado durante los presupuestos 2023, 2024 y 2025. El acuerdo con el Ministerio señalaba que Navarra recibiría 15 millones antes 30 de noviembre de 2024, pero no tiene partida asignada en el presupuesto.

Autovías limítrofes

La prórroga presupuestaria puede suponer también un retraso para las obras de recrecimiento del pantano de Yesa, que volvería a tener fondos limitados, con lo que fecha de finalización para 2027 podría no ser efectiva. 

En esta situación se encuentran también la autovía a Huesca, que vuelve a tener limitado el presupuesto. Quedan seis tramos pendientes de construir, de los que tres están ya en obras y uno recién licitado. En las previsiones plurianuales del Ministerio para este año recogían más de 50 millones de inversión, que es improbable que se vayan a ejecutar, al menos en su mayor parte. 

Lo mismo ocurre con la autovía A-15 a su paso por Soria. El Ministerio adjudicó recientemente el contrato para el tramo entre Fuensaúco y Villar del Campo, en la provincia de Soria, que debería estar finalizado para 2029 pero cuyo presupuesto queda también ahora en el aire.

Otras inversiones

Sin presupuestos también tendrán dificultades para lograr fondos públicos otros proyectos impulsado por Navarra con financiación estatal. El nuevo Instituto de Agrobiología cuenta con 7,5 millones del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, de los que tres debían llegar este año. Pero no hay partida por esa cantidad. Tampoco la habrá para el Centro Nacional de Industrialización, que se queda con los 300.000 euros que ya tenía el año pasado.

Las inversiones

  • TAV y Canal de Navarra. Las obras dependen de dos empresas públicas, Adif y Canasa, por lo que no les afecta directamente la prórroga de los PGE. La inversión dependerá de la voluntad política y de los trámites administrativos 
  • Yesa. El recrecimiento tiene fecha de finalización en 2027, pero podría sufrir nuevos retrasos. Presupuesto prorrogado.
  • N-121. Repite los 15 millones del año pasado. El Gobierno central los podría ejecutar si quiere.
  • Túneles de Belate. El Ministerio ha comprometido 40 millones para 2023, 2024 y 2025. Para este año estaba prevista una subvención de 15 millones pero está recogida en los presupuestos.
  • A-21 y A-15. Las autovías a Huesca y a Soria ven prorrogados sus presupuestos lo que volverá a retrasar la construcción de algunos de sus tramos.