El Gobierno de España ha decidido este domingo llamar a consultas 'sine die' a la embajadora en Argentina, María Jesús Alonso, después de que el presidente de Argentina, Javier Milei, haya calificado de "corrupta" a Begoña Gómez, mujer del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

Así lo ha anunciado el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, en una declaración institucional desde el Complejo de la Moncloa, en la que ha exigido también "disculpas" por parte del mandatario argentino.

Durante su intervención en el acto de Vox en el Palacio de Vistalegre 'Europa Viva 24', Milei se ha referido a la mujer de Sánchez. "No saben qué tipo de sociedad y país puede producir el socialismo y qué calaña de gente atornillada en el poder y qué niveles de abuso puede llegar a generar. Aún cuando tenga la mujer corrupta, digamos ensucia, y se tome cinco días para pensarlo", ha comentado.

Albares ha respondido que "sus palabras no tienen precedentes en las relaciones entre dos países unidos por fuertes lazos de hermandad. Al señor Javier Milei se le ha recibido en la capital de España de buena fe para participar en un acto político de la extrema derecha. Se han puesto a su disposición los recursos públicos del Estado español. Sin embargo, a esta hospitalidad y buena fe ha respondido con un ataque frontal a nuestra democracia e instituciones. El respeto mutuo y no injerencia en asuntos internos es un principio inquebrantable".

Asimismo, ha añadido que es inaceptable que "insulte" al Estado español en su visita. Aseguró que "rompe las reglas de la convivencia" y que, "ante la gravedad de lo ocurrido", ha contactado con todos los portavoces parlamentarios y ha recibido el apoyo de "una amplia mayoría", aunque PP y Vox "no se han pronunciado. "España exige disculpas públicas. En caso de no producirse, tomaremos todas las medidas oportunas para defender nuestra soberanía e integridad", ha zanjado.

El choque con Puente

Hace unas semanas, el ministro de Transportes era quien encendía la mecha al insinuar que Milei actuaba bajo la influencia de sustancias estupefacientes. La oficina de Milei publicó entonces un comunicado donde contraatacaba asegurando que el Gobierno español tenía asuntos más importantes de los que preocuparse, como las acusaciones de corrupción contra la esposa de Sánchez, según dijeron. El choque parecía haber quedado atrás, aunque es un hecho que, por ahora, no se ha producido un encuentro bilateral entre ambos mandatarios.

Albares añadió que ha hablado con Josep Borrell, alto representante de la Unión Europea, "que considera que es un ataque al conjunto de la Unión Europea y se pronunciará en este sentido". "Ha llevado las relaciones a su momento más grave en su historia reciente. Por eso, acabo de llamar a consultas a nuestra embajadora en Buenos Aires sine die", añadió. Quiso reiterar el "sentimiento fraternal" del Estado español y exigirle al mismo tiempo respeto a las formas entre dos estados "que excluyen la injerencia en asuntos internos", que esté a la altura del puesto que ocupa y se ajuste a las formas y el respeto que jamás debió abandonar.