El secretario general de Vox, Ignacio Garriga, trasladó ayer en Pamplona el apoyo de la dirección nacional a sus cargos en Navarra, después de que recientemente se desarrollaran protestas contra la instalación de dos mesas informativas de Vox en Pamplona y Berriozar.
“Quiero recordar las imágenes lamentables e intolerables que tuvimos de violencia, de acoso y de amenazas a cargos de Vox en esta región”, dijo Garriga, que exigió al Gobierno de Navarra que “garantice la seguridad de sus cargos y de todos sus actos”.
Preguntado por la cuestión arancelaria, Garriga respondió que su formación entiende que Trump “quiera proteger su producto nacional”.