“El pacto del Ventorro”, como definió ayer el portavoz del PSOE en el Congreso, Patxi López, el acuerdo del presidente valenciano, Carlos Mazón, con Vox para aprobar los presupuestos de la comunidad de este año ha colocado al PP en una posición de extrema debilidad. Tanto el PSOE como el Gobierno español situaron ayer al partido que lidera Alberto Núñez Feijóo fuera de Valencia, de Europa e incluso de la humanidad, tras la afirmación de la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant, de que el jefe del Consell “deshumaniza” a los menores migrantes por su pacto con el partido de Santiago Abascal.
“El PP ahora se ha convertido en Vox directamente”, añadió la también líder del PSOE en la Comunidad Valenciana desde los pasillos del Senado. El anuncio ayer por parte de Junts de un acuerdo para modificar la Ley de Extranjería que posibilitará la distribución de estos menores no acompañados por comunidades de todo el Estado, sobre todo las gobernadas por el PP, enconó aún más un debate que Mazón ya había llevado al extremo el lunes al asumir uno por uno todos los postulados de Vox.
Con la solemnidad de la lectura de una declaración institucional, el presidente de la Generalitat, más que señalado por su ausencia en los momentos más críticos de la dana, pidió agilizar la expulsión de inmigrantes, a los que acusó de paso de cometer pillaje aprovechando ese desastre natural. También anunció la retirada de subvenciones a la difusión del valenciano y a las políticas de memoria histórica, y cargó contra el Pacto Verde Europeo.
Unos postulados que el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, describió ayer como xenófobos, machistas, contrarios a los poderes europeos, a la lucha contra el cambio climático y a la igualdad entre hombres y mujeres. La consecuencia a su juicio es que el PP “ha dejado de ser un partido de la derecha europea”, grupo que ha votado a favor del Pacto Verde Europeo y que tiene su principal competidor en el auge de la ultraderecha con la que Carlos Mazón pacta sin complejos.
A estos reproches se sumó una ministra más, la de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Sara Aagesen, que aseguró que es “ofensivo para los valencianos y la Unión Europea” que el PP y Mazón “abracen el negacionismo”. Frente a ello, aseguró que Moncloa “no va a permitir pasos atrás” en la agenda verde y que estará “muy vigilante”.
El portavoz del PSOE, Patxi López, aseguró que, como consecuencia de dicho acuerdo, “hoy Vox gobierna” en la Comunidad Valenciana. Añadió que, además de “atacar a los migrantes” pese a que miles de ellos se “arremangaron para quitar fango” tras la dana, “eleva a categoría de programa de gobierno el ideario de Vox al completo”, por lo que el PP “convierte las líneas rojas en alfombras rojas” para la ultraderecha.
NEGACIONISMO
La secretaria general del PP, Cuca Gamarra, trató de justificar el pacto apelando a la “reconstrucción” de Valencia ante la situación “excepcional” provocada por las inundaciones. Pese a ello, barones autonómicos como el andaluz, Juanma Moreno, y el gallego, Alfonso Rueda, llamaron ayer a combatir el cambio climático que niega Vox y ahora también Mazón.