El personal de las entidades locales de Navarra quedará finalmente incluido en las medidas urgentes para reducir la temporalidad en el empleo público. PSN, EH Bildu y Geroa Bai han pactado una enmienda al Decreto-Ley Foral 1/2025 para ampliar su alcance y garantizar que a las plantillas de municipios y concejos también les afecten las nuevas condiciones de acceso y permanencia en sus puestos, especialmente, la exigencia de trabajar durante dos años antes de poder acceder a una excedencia.
El texto original, convalidado en el pleno del Parlamento del pasado jueves, excluía de forma expresa a las entidades locales de ciertas restricciones, como las relacionadas con la concesión de excedencias voluntarias. Sin embargo, la enmienda acordada permitirá ahora que los ayuntamientos puedan acogerse al mismo marco normativo que el resto de la Administración Pública de la Comunidad Foral y exijan a sus funcionarios una permanencia mínima de dos años antes de concederles los permisos.
Por su parte, Contigo-Zurekin ha registrado una enmienda con la que propone acotar temporalmente otra de las medidas previstas, tras solicitárselo en una reunión los sindicatos CCOO, UGT y Afapna. En concreto, plantea que la reducción de requisitos en los concursos de traslado, donde se valorará únicamente la antigüedad y los idiomas, con el fin de acortar trámites y facilitar el acceso definitivo a las plazas, tenga un límite de dos años en todos los puestos. En Osasunbidea ya estaba previsto que la nueva fórmula de baremación tuviese carácter temporal.
El decreto ratificado por la Cámara está siendo tramitado como proyecto de Ley Foral por el procedimiento de urgencia. De esta forma, la Mesa y Junta de Portavoces acordó este lunes la apertura del plazo para la presentación de enmiendas, que finalizará este miércoles a las 12:00 horas. El debate y votación definitiva del texto está previsto para este jueves.
Medidas aprobadas
El Decreto-Ley Foral 1/2025 establece un conjunto de medidas para avanzar en el objetivo de situar la temporalidad por debajo del 8% en el conjunto del sector público navarro. Entre los cambios más relevantes se encuentra la agilización de los procesos selectivos, la introducción de incentivos para cubrir plazas de difícil cobertura y la limitación de las excedencias voluntarias.
El Gobierno de Navarra alegó que la concesión de excedencias voluntarias tras la toma de posesión está provocando un “aumento de nombramientos complementarios y ralentizando la conversión de empleo temporal en fijo”, en palabras de la consejera Amparo López, ya que abundan los casos de funcionarios que, tras lograr una plaza y tomar posesión de la misma, automáticamente piden una excedencia para continuar trabajando en el puesto en el que estaban anteriormente.
En lo que respecta a las excedencias, el decreto introduce restricciones adicionales para quienes deseen prestar servicios en otra administración pública, más allá de los dos años de permanencia: se requerirá que la plaza de destino tenga carácter fijo. No obstante, esta limitación no se iba a aplicar a los casos de movilidad entre entidades locales de Navarra, lo que refuerza la necesidad de su inclusión plena en la norma a través de la enmienda acordada.
Otro de los ejes de la reforma es la simplificación de los procedimientos. Se acelerarán las convocatorias pendientes de ejecución correspondientes a las ofertas públicas de empleo de 2022, 2023, 2024 y parte de 2025, acortando los plazos y sustituyendo la publicación en el Boletín Oficial de Navarra por la difusión a través de fichas web.
Precisamente, en el caso de Osasunbidea, el decreto introduce medidas específicas para afrontar el déficit de profesionales en determinadas categorías. Entre ellas, se prevé la aplicación del sistema de oposición en lugar del concurso-oposición en algunos procesos, con el objetivo de facilitar la entrada de personal con menor antigüedad.