Maitane Ipiñazar, secretaria del Euzkadi Buru Batzar y parlamentaria, es exponente de las voces que han pasado a la primera línea política tras la renovación en las filas jeltzales. Atiende a Grupo Noticias tras seis meses en la Ejecutiva nacional de EAJ-PNV y a las puertas del Alderdi Eguna, que este año vive con especial emoción desde sus nuevas responsabilidades.

Han pasado los primeros seis meses del EBB que salió de la IX Asamblea General de EAJ-PNV. ¿Cuál es su valoración de este medio año?

Como todo el mundo cuando afronta nuevas responsabilidades, es necesario un periodo para adaptarse, establecer dinámicas y funcionar de forma fluida. Esa fase ya pasó y trabajamos a pleno rendimiento. Tenemos una hoja de ruta clara que está marcada por las propias ponencias que se aprobaron en el seno de la Asamblea General y contamos con un buen equipo para ello.

¿Y cómo cree que valora la ciudadanía los cambios llevados a cabo tanto al frente del Partido como del Gobierno?

Han sido muchos cambios en poco tiempo: dos diputadas generales mujeres, por cierto, las primeras mujeres en ostentar ese cargo, y las dos del PNV. Después vino la elección del Lehendakari Imanol Pradales, que consiguió formar un equipo que considero que está muy centrado en lo que verdaderamente importa a la ciudadanía, que es de lo que se trata. Le siguieron las renovaciones de las Ejecutivas territoriales con importantes cambios en sus direcciones, y este proceso culminó con la renovación del Euzkadi Buru Batzar, con nuevo presidente al frente, Aitor Esteban, que posibilitó también un cambio en la portavocía de nuestro grupo en el Congreso de los Diputados, siendo nombrada por primera vez una mujer para ostentar esa responsabilidad. Muchos cambios en cuestión de dos años que creo que han dado un impulso a nuestro Partido, sin cambiar lo que somos. Seguimos siendo los y las mismas, pero con savia nueva gracias al relevo generacional.

“Hemos acometido muchos cambios en cuestión de dos años que creo que han dado un impulso a nuestro Partido, sin cambiar lo que somos”

Una de las Ponencias aprobadas en la IX Asamblea General les ponía como deberes fortalecer y activar la militancia. ¿Cómo va la elaboración de los nuevos Estatutos del PNV?

Estamos inmersos ahora mismo en esa tarea. Llevamos reuniéndonos desde mediados de julio con la Comisión de Estatutos nombrada para elaborar una propuesta de renovación del texto vigente que presentaremos ante la afiliación y se abrirá el proceso para que todas las organizaciones municipales puedan hacer sus aportaciones. Creemos que es uno de los hitos más importantes que tenemos entre manos, junto con la digitalización, porque marcará el futuro funcionamiento de la propia organización, que queremos que sea cercana y lo más próxima a las formas de comunicar propias de este momento.

La pasada semana se vivió un hito en su partido. ¿Cómo fue el regreso del PNV al número 11 de Av. Marceau?

Fue muy simbólico y emotivo. Además de la anterior ejecutiva del EBB, el Lehendakari y distintos cargos políticos, acudieron personas que, en su día, aportaron muchísimo para que ese edificio de la calle Avenue Marceau número 11 de París fuera adquirido en nombre del PNV y se mantuviera intacto durante esos años. Formará parte de nuestra historia, nuestra historia como Partido, pero también nuestra historia como Pueblo, porque este lugar tan emblemático fue sede del Gobierno Vasco en el exilio; por lo tanto, sede y hogar también de aquella Euskadi que luchó en favor de su libertad y sus derechos como Pueblo. Nos pertenece a todos y todas. 

“El edificio de la Avenue Marceau fue sede y hogar de aquella Euskadi que luchó en favor de su libertad y sus derechos como Pueblo ”

En la presentación que hizo usted misma del Alderdi Eguna, anunció un cambio en el escenario. ¿A qué responde? 

El tiempo ha demostrado que somos un partido dinámico, capaz de adaptarse a los nuevos tiempos y las nuevas realidades sociales y que escucha a la sociedad. Y ese ADN lo hemos querido trasladar a hechos, cambios que muestran que estamos cerca de la gente y que nos adaptamos a los nuevos formatos. Creemos que es algo innovador y esperemos que guste a los y las asistentes al Alderdi Eguna. Desde aquí animo a todos y todas las alderdikides y alderdizales a que se acerquen mañana a Foronda porque realmente creemos que va a ser muy especial. 

¿Cree que en un contexto de desafección ciudadana siguen teniendo cabida este tipo de eventos de partido?

Sin ninguna duda. Para nosotros y nosotras el Alderdi Eguna es uno de los días más importantes del año. Es más, yo diría que somos el único partido a nivel europeo que seguimos siendo capaces de congregar a miles y miles de personas para este tipo de eventos. Lo tenemos marcado en rojo en el calendario. Y eso se nota en las caras de la gente cuando pisas las campas de Foronda. La gente está ilusionada, contenta, con ganas de disfrutar el día con amigos y amigas que quizás solo vean de Alderdi a Alderdi. Es un día muy emotivo, por eso lo organizamos con tanta ilusión. 

“Que la ciudadanía responda ante la barbaridad en Gaza es normal, sano, porque muestra que algo de humanidad nos sigue quedando”

La ciudadanía sitúa la vivienda como una de sus principales preocupaciones. ¿Qué piensan hacer para dar una respuesta a esta problemática?

La realidad es que el mercado está ahora regulado por dos leyes de vivienda que no han funcionado, y estamos sufriendo las consecuencias. Dos leyes que, por cierto, EH Bildu votó a favor y que, evidentemente, algo tienen que ver con la situación actual. Ante esto, estamos trabajando para crear un ecosistema favorable para adquirir o alquilar en condiciones viables, y eso pasa por construir más y más rápido, además de poner en marcha avales que faciliten la compra. Espero que en este reto que tenemos por delante nadie se baje del tren y podamos llegar a solucionar esta situación.

¿Cómo valora la solidaridad mostrada por la sociedad vasca con la situación que se vive en la franja de Gaza?

La sociedad vasca siempre se ha caracterizado por ser solidaria y responder ante las injusticias. Estamos ante un genocidio, eso es evidente, un genocidio que se retransmite en directo. Por lo tanto, que la ciudadanía responda ante semejante barbaridad es normal, yo diría que sano, porque muestra que algo de humanidad nos sigue quedando. En mi caso, vivo este conflicto desde un ámbito muy personal. En septiembre del 2022, un grupo de parlamentarios y parlamentarias vascas tuvimos la oportunidad de visitar Cisjordania de la mano de ONGDs vascas que operan en Palestina. Volvimos horrorizadas porque vivimos en primera persona la absoluta represión a la que se le somete diariamente a la población palestina. Fue un antes y un después para muchas. Lo que ahora espero es que la comunidad internacional tome cartas en el asunto. No podemos mirar para otro lado mientras masacran una población. No nos lo vamos a perdonar.