El cineasta bilbaino Pablo Berger ha mostrado su felicidad después de que 'Robot Dreams', producida en Navarra, haya sido nominada al Oscar a la mejor película animada de la 96 edición de los Oscar, especialmente, porque "es David contra Goliat, es una pequeña película contra las grandes películas de los grandes estudios americanos".

Sin esconder que ha seguido en directo las nominaciones desde Barcelona y que "hemos gritado tanto que nos han oído hasta en Los Ángeles", tampoco ha obviado que todo su equipo está desde entonces con una sonrisa enorme y "sorprendidos".

"Es un sueño, no de 'Robot Dreams', sino de todos los que nos dedicamos al cine, que soñamos en algún momento ¿Y si algún día vamos a los Oscar? Pues mira, con 'Robot Dreams' allí estaremos".

Si bien es verdad que el filme, protagonizado por el solitario perro Dog, estaba en las listas de predicciones y entre las favoritas, no obstante, a su juicio, "hemos sido como los 'black horses', como aquel caballo que va corriendo desde atrás, desde atrás, desde atrás y, de repente, se cuela".

"Soy un aprendiz de director de animación"

Además, para Berger, que "soy un aprendiz de director de animación", es un honor estar nominado en la misma categoría que el "gran maestro" japonés Hayao Miyazaki.

La película, una coproducción hispano-francesa de las productoras Arcadia Motion Pictures, con sede en Barcelona, y Noodles Production, arraigada en París, que ya fue premiada en Berlín como la mejor película de animación de la Academia del Cine Europeo, compite con 'The Boy and the Heron', de Hayao Miyazaki; 'Elemental', de Peter Sohn; 'Nimona', de Nick Bruno y Troy Quane, y 'Spider-Man: Across the Spider-Verse', de Joaquim Dos Santos, Kemp Powers y Justin K. Thompson.

Para el director bilbaino esto "no es una competición deportiva, es una ruleta y le tocará al que le tenga que tocar", aunque "vamos apadrinados por una gran distribuidora, Neon".

De todas maneras, ha avanzado, bromeando: "iremos a Los Ángeles a hacer campaña y con el megáfono estaremos gritando, ¡Pasen y vean 'Robot Dreams'! ¡Voten por 'Robot Dreams'!".

La película, ambientada en la Nueva York de los años ochenta, con un perro protagonista que un día construye un robot y ambos se hacen muy amigos, cree que está gustando a público y crítica porque "es una película de las de antes, dibujada a mano, animación 2D tradicional".

Asimismo, es una "historia universal, de amistad, amor, en la que hay empatía", con la emoción primando "por encima de la técnica".

Pablo Berger, mientras atendía a primera hora de la tarde a los periodistas con una sonrisa de "patata frita", de felicidad absoluta, no ha dejado de responder llamadas telefónicas de felicitación.