palma. El mayor incendio registrado nunca en Ibiza continúa activo tras afectar a más de 2.000 hectáreas de pinar en la zona noreste de la isla y provocar el desalojo del hotel Paradise en Portinatx, donde se alojaban 700 turistas, y el Colegio Público de Sant Joan de Llabritja, donde había 140 niños. Las llamas obligaron también a desalojar a 250 vecinos de las zonas afectadas.

El incendio se declaró el miércoles sobre la una de la tarde en la Serra de la Morna, una zona de densa vegetación de pinar, y su origen podría haber sido una brasa desprendida de un aparato para crear humo que usaba un apicultor para ahuyentar a las abejas.

El hombre, que fue detenido acusado de un delito de incendio forestal por imprudencia grave, declaró ante el juez de guardia de Ibiza, que decidió prolongar su arresto en la cárcel por un máximo de 72 horas hasta conocer el contenido de un informe de la Guardia Civil sobre el origen del fuego.

En las labores de extinción participan unas 300 personas, entre efectivos de los bomberos, de Protección Civil y de la Unidad Militar de Emergencias (UME), cuerpo del Ejército que ha enviado a Ibiza 200 militares. Además de los trabajos en tierra, el incendio también se aborda desde el aire con ocho helicópteros y ocho aviones, de los cuales cinco son de tipo hidroavión.

Las condiciones climatológicas han ayudado a su propagación, con altas temperaturas, viento y baja humedad, pero la Agencia Estatal de Meteorología prevé que alrededor del mediodía de hoy el viento gire de suroeste a dirección nordeste, lo que podría colaborar en que no continúe extendiéndose. Además, la previsión en la zona indica una bajada de temperaturas con nubes altas y medias, que suavizarán el clima a lo largo del día y podría ayudar al control del fuego.

El presidente del Gobierno balear en funciones, Francesc Antich, calificó de "desastre ambiental brutal" el incendio y aseguró que "se está haciendo todo lo posible" para frenar la propagación del fuego, algo muy complicado debido al rápido avance de las llamas.

Antich explicó que el operativo de emergencias ha trazado una "estrategia" de actuación para que el incendio "no trascienda a otras masas forestales", y para ello, los medios humanos y 200 efectivos de la UME están creando cortafuegos en varios puntos. Antich puntualizó que el perímetro afectado es "muy grande", y se necesita "mucha fuerza" para luchar contra las llamas. Así, subrayó que, por el momento, es imposible de predecir cuándo podría darse por controlado el incendio, y explicó que la principal "preocupación" del operativo es la propagación del fuego si el viento sopla con más fuerza.

Por su parte, la ministra de Defensa, Carme Chacón, garantizó que habilitará "todos los medios necesarios" para contribuir a la extinción del incendio. Chacón sobrevoló la zona y recibió información de los responsables de los trabajos para sofocar el fuego, en los que participan 200 miembros de la Unidad Militar de Emergencias (UME) desplazados desde la península.

La ministra anunció que hoy se incorporarán otro centenar de soldados de la UME que aportarán seis vehículos autobomba para contribuir a sofocar el mayor incendio forestal declarado en Ibiza. "La prioridad es controlarlo", incidió la titular de Defensa.