estella-lizarra. Se trata de los jóvenes Maitane y Asier Castillo y Laura González oriundos de Lerín los dos primeros y de San Adrián, la tercera, que se encuentran en Calafell disfrutando de unas vacaciones en familia y es que Maitane y Asier son hermanos y Laura es la novia de este último.
Los hechos tuvieron lugar el lunes cuando a las 13 horas estos jóvenes paseaban. "Vimos en la orilla a un hombre que estaba pidiendo auxilio y diciendo que alguien se ahogaba. La persona estaba alejada de la orilla y veíamos que estaba tumbada en el agua boca arriba. Sin pensarlo nos metimos para intentar sacarla", explica Maitane.
No obstante, el mar estaba bravo y este trío no lo tuvo nada fácil para rescatar a esta mujer, de más de 70 años. "Había muchas olas. Estaba la bandera amarilla, pero el problema era que había muchas corrientes. Cuando llegamos hasta la mujer la cogimos y la remolcamos, pero era casi imposible sacarla porque se encontraba metida en un sitio lleno de corrientes", señala Maitane Castillo que indica que la señora estaba agotada. "Aunque no estaba inconsciente, sí exhausta, sólo decía que se moría y que se moría. La empezamos a sacar, pero venían muchas olas y muy grandes y nos tragaban a nosotros también", explican.
en peligro Por ese motivo, estos tres jóvenes también se vieron en apuros. "Hubo un momento en el que nosotros mismos pedimos socorro porque no podíamos salir. Sin embargo, desde la orilla no nos oían", explica y señala que decidieron turnarse. "Cuando nos dimos la vuelta y vimos que no venía nadie a ayudarnos y que no avanzábamos nada empezamos a turnarnos y en un instante parecía que me tragaba la corriente de abajo. Así que me tuvo que remolcar mi hermano y a él, Laura", indica la joven de 23 años que tiene el título de socorrista de piscina. Así poco a poco fueron llegando a la orilla. "Cuando ya tocábamos suelo la cogimos entre los tres y la sacamos, la tumbamos en posición de seguridad y empezó a vomitar el agua. Estaba aturdida", señala y explica que tras unos minutos más llegaron las ambulancias.
Toda esta secuencia de hechos, la siguieron desde el balcón del apartamento los padres de Maitane y Asier, Nieves Cruz y Alfredo Castillo. "Ellos nos veían desde el apartamento y llamaron a emergencias". Ayer Nieves Cruz aseguraba que por la noche no había pegado ojo "reviviendo una y otra vez lo que pasó y lo que podría haber pasado", explicaba.
Estos tres héroes continúan con sus vacaciones, pero no dejan de pensar en lo ocurrido. "Cuando lo recuerdo se me pone la piel de gallina. Pienso que si hubiésemos llegado un minuto más tarde a lo mejor la mujer hubiera fallecido porque estaba exhausta para cuando llegamos", señala Castillo y explica que el marido de la señora, que no sabía nadar, se mostró muy agradecido por el rescate.
