Un vecino de Ansoáin fallece tras ser apuñalado en un bar de la localidad

Ansoáin. Un joven de 30 años vecino de la localidad, Viktor S.L., de nacionalidad búlgara, falleció alrededor de las 05.00 horas de ayer después de recibir varias puñaladas en el abdomen, causadas presuntamente por Serapio Ugal Grávalo, de 38 años y de etnia gitana. Además, dos menores de edad, también de la misma etnia, se vieron presuntamente implicados.

El incidente tuvo lugar en un céntrico establecimiento de la localidad, el bar Tolo, local en el que el fallecido hacía las veces de portero controlando que los clientes no portaran vasos de cristal al exterior.

Los hechos ocurrieron a las 01.10 horas de ayer, cuando los presuntos agresores quisieron entrar al bar Tolo. Viktor, que se encontraba entre las dos puertas de entrada controlando el acceso y que nadie sacara vasos de cristal a la calle, les negó la entrada, ya que los presuntos agresores eran conocidos por su comportamiento pendenciero.

Tras la negativa de Viktor de dejarles entrar al bar, según testigos presenciales, uno de los presuntos agresores se acercó a una furgoneta blanca que tenían estacionada en la calle Lapurbide -misma calle en la que se localiza el bar- y sacó de ella un cuchillo de grandes dimensiones con el que asestó al menos dos puñaladas al fallecido, quien fue trasladado en estado de shock al Complejo Hospitalario de Navarra, donde finalmente falleció.

Al ver la gravedad del ataque, los tres presuntos agresores se montaron en la furgoneta e intentaron huir del lugar, pero la rápida actuación policial, favoreció que fueran detenidos a los pocos minutos.

La Policía Municipal de Ansoáin recibió el aviso de SOS Navarra mientras se estaban produciendo los hechos, y movilizó a los seis policías que patrullaban esa noche en el pueblo. Dos vehículos policiales bloquearon el cruce de la calle Lapurbide con la calle Canteras e impidieron que la furgoneta saliera del pueblo.

Según fuentes policiales, en un primer momento los presuntos agresores mostraron resistencia e intentaron huir, llegando a pisar con la rueda de la furgoneta el pie de uno de los agentes. Estos se afanaron por impedir la huida y utilizaron un spray policial para intentar retener a los fugitivos, sin que éste surtiera efecto. Finalmente tuvieron que romper la ventanilla del conductor para, de esa forma, inmovilizarle.

Al ser poco más de medianoche y encontrarse la localidad de Ansoáin en fiestas (suspendidas desde ayer por decisión municipal), fueron muchos lo vecinos que presenciaron la escena. Por ello, cuando los tres presuntos agresores salieron del vehículo, muchos testigos intentaron agredirles. La Policía Municipal de Pamplona, que acudió como refuerzo, consiguió controlar a la masa y de esta forma evitó males mayores. La Guardia Civil se ha hecho cargo del atestado.

De los tres implicados en el incidente, el mayor de edad, Serapio Ugal Grávalo, es vecino del barrio pamplonés de la Rochapea y reside en una calle lindante a la localidad de Ansoáin. El presunto agresor frecuentaba la zona y era conocido en el pueblo.