PAMPLONA. La comisión de personal de la Policía Foral, formada por AFAPNA, APF, CCOO, CSIF, ELA y UGT, criticó ayer la sustitución de la tradicional boina roja de su uniforme por una gorra tipo visera de color gris (que ya usan) ya que supone una "pérdida de identidad" y un gasto que se podía haber "evitado". La comisión apunta que "frente a los posibles beneficios prácticos y de operatividad que pudieran argumentarse para justificar el cambio, y al margen de los debates estéticos sobre la cuestión, lo cierto es que los policías forales sentimos como una pérdida de identidad el hecho de que ya la boina no forme parte de nuestro uniforme de trabajo diario". "La txapela es una prenda que nos identificaba y nos singularizaba del resto de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado", dice en un comunicado en el que agrega que, en tiempos de "gravísimos recortes sociales y de retrocesos en las condiciones laborales, materiales y económicas del conjunto de la Administración, el coste de 30.000 euros (25 euros por gorra) que ha supuesto el cambio se podría haber evitado".