PAMPLONA. Era casi la víspera del día de los enamorados cuando decidieron derrumbar el portón de la iglesia de San Vicente Mártir de Larumbe, en la Cendea de Iza, y saquear sus principales reliquias. De allí se llevaron cálices y copones de plata, dos relicarios de metal, una vinajera de acero y un hostiario de plata fechado en el siglo XVI. Así hasta 13 objetos de distintos siglos. La misma noche, también procedieron a desvalijar la iglesia de San Miguel Arcángel de Biurrun-Olcoz, donde se llevaron un cáliz de plata fechado en 1622, un sagrario de metal dorado y una sacra de latón. Ambos robos fueron denunciados en la Policía Foral, cuya brigada de delitos económicos y contra el patrimonio ha conseguido recuperar ahora estos valiosos objetos sacros, además de otras 18 piezas más de culto religioso de las que se está buscando la procedencia.

La operación policial se finiquitó con el arresto de dos varones, vecinos de Pamplona, fichados ya como habituales entre los cuerpos policiales por delitos de robo. Se trata de S.G.M., de 38 años, que ya está encarcelado, y de F.J.B.A., de 31 años, que ha quedado libre a la espera de juicio.

EL HUIDO RESULTÓ LA CLAVE La investigación comenzó a esclarecerse en junio, cuando la Policía Municipal de Zizur Mayor, en una actuación conjunta con la Policía Foral, arrestó a dos personas que intentaban robar en el interior de un garaje comunitario de la localidad. Antes ya lo habían hecho en varios garajes y trasteros más. Ahí se detuvo a F.J.B.A. Pero hubo un tercer implicado en aquellos robos en Zizur que ha resultado clave para recuperar los objetos de culto robados. S.G.M. pudo huir del dispositivo policial montado por los robos en trasteros tras acometer de manera violenta a uno de los agentes municipales de Zizur. Sin embargo, hace un mes se consiguió identificarle y proceder a su detención. Y al llegar hasta él, han podido aclararse los robos en los templos navarros.

Tras conseguir una orden judicial de registro de un trastero, propiedad de un familiar de S.G.M., los agentes lograron recuperar diversos objetos de culto religioso que correspondían, en su mayoría, con los robados en Olcoz y Larumbe. También se localizaron otras piezas, entre ellas el cáliz del siglo XVII de la iglesia de Larumbe, en un domicilio particular.

NO SE PRECISA EL VALOR La Policía Foral tiene constancia de que se ha intentado la venta de estos objetos, junto con otros, en el mercado negro de arte. Aunque no se sabe si llegó a haber alguien que pujara por las piezas, parece ser que no consiguieron realizar con éxito ninguna transacción. El valor económico del material recuperado no pudo ser precisado ni por el Arzobispado de Pamplona ni por el cuerpo autonómico.

l Iglesia de Larumbe:

- Tapa vinajera, lleve sagrario con borla de hilos dorados, teca reliquia San Urbano.

-Campanilla consagrac. metal (s.XX).

-Ostensorio-custodia plata (s.XVIII)

- Copón de plata Meneses (s.XX).

- Bandeja vinajeras plata (s.XX).

- Relicario metal San Gregorio (XIX)

- Cáliz de plata del s.XVIII.

- Relicario de metal del siglo XIX.

- Copón de plata del siglo XVIII.

- Relicario metal San Urbano (s.XIX).

-Cáliz de plata (siglo XVIII).

- Vinajera de acero (XX), hostiario de plata (XVI), tapa de copón...

- Regalo conmemorativo de aniversario de San Francisco Javier (s.XX).

l Iglesia de Olcoz-Biurrun:

- Sagrario de metal dorado (s.XX).

- Sacra de latón (s.XIX).

- Cáliz de plata dorada y esmaltes. Fechado en 1622.

l Sin determinar: 3 cruces de metal (XIX y XX), cáliz dorado y de plata, anforillas, copón de metal, hisopo...