Los agresores de la mujer y la hija de Paco González se niegan a declarar

madrid - El juez de Instrucción número 5 de Móstoles tomará hoy declaración a Lorena G.F. e Iván T.P., los agresores de la mujer y de la hija del periodista Paco González, por un delito de intento de homicidio. Tras negarse ayer a declarar ante la Guardia Civil, los acusados pasarán hoy a disposición judicial, tras cumplirse las 72 horas máximas legales de estar detenidos. Se les acusa a cada uno de dos delitos de intento de homicidio, un delito que acarrea una pena de hasta siete años y medio de prisión. En el caso de la mujer se elevaría por la agravante de disfraz, dado que cometió los hechos con el rostro cubierto con un pasamontañas y unas grandes gafas negras.

Un abogado penalista indicó ayer que es previsible que la imputación acabe siendo por intento de asesinato, dado que los agresores buscaron "una situación de indefensión de las víctimas" y el ataque estaba planeado, puesto que se encontraron unas sábanas y unos grilletes en una mochila. Para la mujer, este letrado pediría un máximo de 15 años de prisión por dos intentos de asesinato, con la agravante de disfraz. Para el agresor, un asesinato en grado de tentativa, con una pena de hasta 12 años y medio de prisión. Si se probara que buscaban secuestrar a la familia se les imputaría un delito de detención ilegal, si bien esta hipótesis se cae debido a que la mujer habría contratado a unos sicarios para matar a la espoa del periodista. Por tanto, la intención era de matar, según este letrado.

planes Por otra parte, uno de los sicarios búlgaros que presuntamente fueron contratados para matar a la mujer de Paco González reveló esos planes hace unos meses a un mendigo en la T-4 del aeropuerto de Madrid-Barajas para que los comunicara a la Policía. Tras ello, un subcomisario de la comisaría del aeropuerto redactó una nota interna de lo ocurrido, que fue remitida al Grupo de Homicidios de la Brigada Judicial de Madrid de la Policía Nacional y que a su vez se lo pasó a la Guardia Civil. La Benemérita incorporó el testimonio a la denuncia por amenazas presentada por el periodista en octubre en el cuartel de Las Rozas. Gracias a investigaciones posteriores, el supuesto sicario fue detenido poco después. Esta nueva información confirma la hipótesis de que los sicarios no tenían la intención de matar a su mujer, sino más bien extorsionarles. - E.P.