pamplona - La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Navarra condenó ayer de conformidad a cuatro varones, vecinos de la Ribera, que formaban un clan que portaba armas y se dedicaba a la venta de todo tipo de maquinaria robada, así como al tráfico de drogas. El juicio no hubo de celebrarse después de que la Fiscalía acordara con las defensas una rebaja en las penas, que se quedan entre un año y cinco años de prisión por los delitos de receptación, tráfico de drogas y tenencia de armas. En ejecución de sentencia, la Audiencia decidirá sobre el ingreso en prisión de los acusados, para los que sus letrados solicitaron el ingreso en centros de desintoxicación para eludir la cárcel.
Según los hechos probados en la sentencia, realizados entre 2011 y 2012, el procesado Fabián Alayeto Arbizu (5 años de cárcel) utilizaba habitualmente una finca de Cascante propiedad de otro de los acusados, Francisco Javier Pulido Rodríguez (4 años y 8 meses de prisión). Este lugar servía de almacén de sustancias estupefacientes y de maquinaria de construcción sustraída que luego era vendida a terceras personas, que desconocían la procedencia ilícita.
todo un almacén Así, el 7 de julio de 2012, estos dos acusados junto a otro más, Pedro Jesús Hernández Jiménez (1 año de cárcel), entregaron una centralita eléctrica a un particular procedente de una retroexcavadora previamente sustraída para colocarla en una máquina que previamente le habían vendido. Además, dentro de un frigorífico que había en la citada finca se hallaron varias bolsitas de anfetaminas, dos balanzas de precisión, una libreta de anotaciones para las transacciones de drogas, así como una granada de mortero (que carecía de capacidad destructiva porque no podía explosionar, pero se considera arma de guerra), una escopeta de cañones recortados en perfecto estado y abundante maquinaria como taladros, cizallas, radiales, sierras, lijadoras..., además de una hormigonera, un toro mecánico, dos mesas sierra y 9 placas solares previamente robadas.
En el domicilio de Pulido, situado en Novallas (Zaragoza), se localizaron además el 23 de julio de 2011 varias bolsas que sumaban más de 80 gramos de anfetaminas. Además, en un cuarto de la segunda planta, fueron intervenidas distintas maquinarias de obras como taladros, grapadora neumática, medidor láser, sillas de montar a caballo, radiales y diversas herramientas, así como gran cantidad de relojes y radiocasetes procedentes de distintos robos. Tras la investigación policial que se inició, también se tuvo conocimiento de que otro acusado, Ángel María Fernandino Martín (4,5 años de cárcel), que mantenía estrecho contacto con los otros, suministraba sustancias estupefacientes (sobre todo speed) al resto de acusados, en especial a Pulido, que estos posteriormente vendían. Al registrar la finca de Ultzurrun del acusado Fernandino se hallaron casi 20 gramos de anfetaminas y un revólver de calibre 38 en perfecto estado y munición.
implicado en un crimen Uno de los condenados, Francisco Javier Pulido, está además acusado del asesinato de un vecino de Fustiñana de 39 años. La Fiscalía pide para él y para otros cuatro procesados 21 años de cárcel y el juicio con jurado se celebrará después del verano.
Francisco Javier Pulido Rodríguez, inductor del crimen de Tudela. Ayer fue condenado a cuatro años y ocho meses de prisión. Es el principal acusado por el crimen de un vecino de Fustiñana, que murió apaleado tras un ajuste de cuentas.
Fabián Alayeto Arbizu. Cinco años de cárcel.
Ángel María Fernandino Martín. 4,5 años de cárcel.
Pedro Jesús Hernández Jiménez. 1 año de prisión.